¡Amnistía ya!: Augusto Cupertino Rubí Leri

Print Friendly, PDF & Email

Desde algún lugar de la Patria.

Todo empezó el 1 de diciembre del 2000, cuando miles de mexicanos, estábamos contentos por el cambio de gobierno que se había dado, pero poco a poco todo iría tomando su verdadero curso hasta convertirse en un Estado Monstruo, un Estado Fallido, que se había disfrazado y se convertiría  en lo que hoy conocemos como PRIAN.

Corrían los primeros días del gobierno foxista, cuando el primer síntoma de que las cosas no habían cambiado se dio con la cacería de brujas en contra de los “acaparadores de granos”, esto en principio era una copia barata de todos los gobiernos anteriores que hicieron la misma acción para llamar la atención, al mismo tiempo desviarla, para apoderarse del pedazo de pastel que se proporcionarían ellos mismos de lo que quedaba de México, o lo que se puede hacer con México, dejando atrás aquellos años de gobiernos republicanos, Constituyentes y Reformistas, poniendo en práctica lo que dijo un Presidente vecino: “No te preguntes que puede hacer tu país por ti, pregúntate que puedes tu hacer por tu país”.

Cuando termina el sexenio de Fox, se había consumido todos los nichos de negocios de los que dejan grandes ganancias, además firmaron el Plan Mérida con el vecino país del norte, “don Chente” apuntó mal su artillería, pues él creía que el único negocio que le quedaba era convertirse en un capo di toti capi, cuestión que sigue vigente hoy día, pues él, siendo la persona menos apropiada por manifestar entusiasmo desmedido en la legalización de la marihuana.

Pero llegó su “consiglieri”, el hijo desobediente y borracho Felipe Calderón, quien demostró a los mexicanos que no se nos deben dar libertades, mucho menos la de expresión, y que si bien el negocio de la delincuencia no era como su apá Fox lo había imaginado, entonces en una noche bohemia inició la Guerra contra el Narcotráfico, lo que más adelante se conocería como la Guerra en contra de la Delincuencia Organizada, ya entrado en copas y bien asesorado por los gringos, copió el modelo del combate a la mafia italiana de los 70´s, lo cual incluía la chulada de herramienta conocida ahora en México como “Testigos Protegidos”. Así, acompañado de todos los mafiosos, se apoderaron de todos los negocios que estaban detrás de tan mordaz, sangrienta e infructuosa “guerra”, ya en una de tantas reuniones etílicas con Genaro Garcia Luna, Ramon Eduardo Pequeño y todos sus lugartenientes, se autonombró el “Capo di tuti Capi”.

Uno de sus mayores negocios dentro del grupo de mafiosos, lo realizó con la familia Foxini, pues ya empoderados los Calderonini, a través de recovecos legales, prestanombres, términos legaloides y artilugios notariales, se hicieron de concesiones para construir cárceles privadas, y así mandar un mensaje al mundo entero que sus gobiernos cumplían con los tratados internaciones en materia de Derechos Humanos; extraoficialmente se sabe que fue Carlos Slim quien puso la primera piedra de estos centros, al acceder financiar todos los demás centros construidos en estos 2 sexenios, la empresa ICA aceptó construir estos lugares para rentarlos, con opción a compra, y de esta manera los capos de las Secretarias de Foxini y Calderonini, firmaron todo lo conveniente para salir salpicados con beneficios económicos para la posteridad. (Aquí abro un paréntesis, en febrero de este año vencía el contrato de prestación de servicios de la Empresa GL & Associates Consulting de Genaro García Luna para la operación de Centros Federales de Reclusión, se desconoce si se renovaron dichos contratos, ojo Alfonso Durazo)

Llega el turno del “copetón” el que en sus 6 años de el “capo di tuti capi” (por aquello de que Los Pinos le dan la sombra) llevó al despeñadero los 18 años de desgobierno del PRIAN, es increíble todas las historias que se inventaron durante esos 18 años, son increíbles las cosas que sucedieron y es increíble que los prianistas creyeran que iban a poder continuar engañando al pueblo, pues muy conscientes estaban de aquello que dice que “el pueblo ama a sus tiranos”, desestimaron la sabiduría del pueblo mexicano, bondad que se vio a flor de piel al darle un voto de confianza a los gobiernos neoliberales y permitir que el “copetón” llegara volando con su gaviota y juntos los dos escribirían la peor novela producida de todos los tiempos en la historia de México.

La novela comenzó y continuó con dos revanchismos de los talibanes Chuayffet y Murillo Karam, pero ninguno de los dos aguantó vara, luego les surgió su “Waterloo” o mejor dicho su Ayotzinapa, inmediatamente comenzó la tragicomedia de la “Casa Blanca”, con sendas actuaciones del “copetón” y su “gaviota”, se mostraron a todo México, confirmando el adagio popular “más vale pedir perdón que pedir permiso”, ellos si pueden arreglar todo con un “disculpen ustedes mexicanos”; esa novela ha sido la más mala producción, el peor guion, el peor drama y contenido de toda la historia de México, digna de un premio de Holliwood al peor cortometraje.

Cuando esta pesadilla de 18 años comenzó en el año 2000, al poco tiempo el pueblo desaprobó los primeros meses de gobierno, comenzaron con su campaña: “quítale el freno al cambio” (¿lo recuerdan?), sin embargo, el pueblo es sabio y a los primeros meses de cambio, metieron el freno de mano, pero se equivocaron, nuevamente le dieron un voto de confianza al gobierno neoliberal, pusieron un freno de cambio, mientras esperaban el relevo para desatorar temas como: “Los mexicanos hacemos trabajos que ni los negros quieren hacer” Fox dixit, o el famoso “Comes y te vas”.

Y así que entre confianza y gandallismo, llegó el Licenciado en Fraudes y Alcoholes (Noroña dixit) regresando a los años de López Portillo, con una mezcla de Santa Inquisición con Gestapo, acompañado esto de un total servilismo hacia los gringos, no hubo nadie que se atreviera a contestar sus “parábolas” como aquella que dijo cuando intensificó “su guerra” contra el narcotráfico: Hagan de cuenta que yo como un médico cirujano, abrí un cuerpo para operar una apendicitis, pero sorprendentemente había un cáncer” la respuesta ahora a esa parábola (ya sin temor de represalias a la que acostumbraba en su trágico sexenio) es, que como médico primero, hizo mal su diagnóstico, desde allí era un mal médico, luego si no podía operar un cáncer, debio haber declinado para que el trabajo lo hiciera un especialista, pero a pesar de la obviedad, ya en un tercer estado de ebriedad, se aventó la operación y los resultados siguen y seguirán por un rato más saltando a la vista, solo imagínense estimados lectores, cómo va a cerrar una herida con más de 100 mil muertos, 150 mil desaparecidos, miles de personas privadas de su libertad injustamente, miles de procesados con testigos falsos, miles de culpables fabricados con acusaciones falsas como las de la señora Wallace, cientos de Jueces mantenidos a raya por la criminalización de la Justicia, miles de personas sufriendo por una defensa adecuada, por injusticias, debido a la industria del crimen que se genera con ésta.

Desgraciadamente los muertos ya no los podemos revivir, a los desaparecidos poco a poco se esclarecerán esos casos, pero con las personas privadas de su libertad injustamente, por violaciones a los derechos humanos, por testigos protegidos o testigos colaboradores declarados ya por juzgados como testigos falsos y mendaces, entre ellos los favoritos de Felipe Calderon, Genaro García Luna y Marisela Morales, “EL PITUFO” Y “PACO”, a todas estas personas si se les puede hacer ¡JUSTICIA YA!

Aquí surgen grandes interrogantes:

¿Qué espera el gobierno para darles AMNISTÍA? (porque son resultado de una “guerra” fallida pero guerra al fin).

¿Qué es lo que detiene el trabajo que realizó la Senadora Nestora Salgado?

¿Qué es lo que detiene el trabajo que realizan activistas como Guadalupe Lizarraga, David Bertet, el Padre Solalinde, el licenciado Jefté Méndez y muchos otros más?

¿Qué es lo que detiene a este gobierno otorgar la AMNISTIA a todos los presos políticos del PRIAN?

Para elaborar una Ley de Amnistía hay palabras claves como: Vicente Fox, FECAL, Peña Nieto, Genaro García Luna, Facundo Rosas, Ramón Eduardo Pequeño, Medina Mora, Murillo Karam, Marisela Morales, “guerra” al narcotráfico, 18 años de gobierno neoliberal, testigos protegidos, violación a los derechos humanos, fabricación de culpables, pruebas ficticias, presos políticos, criminalización de la Justicia, y un largo etcétera.

AMINISTÍA YA.

Augusto Cupertino Rubí Leri.