Clase media, enemigo a vencer por AMLO y la 4T: Alfredo Martínez de Aguilar

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* El gobierno de la 4T, a través de sus legisladores federales agudiza las contradicciones objetivas y subjetivas de la sociedad mexicana, para imponer un régimen autocrático, autoritario y dictatorial.

* La estrategia para conseguirlo es pauperizar y proletarizar a la clase media. Los pobres viven ya de los programas sociales y los ricos, son amigos, socios y cómplices de la nueva mafia del poder de Morena. 

 

Los gobiernos populistas de izquierda, socialistas y comunistas, prometen el paraíso en la tierra a los pobres y terminan hundiéndoles en el infierno diario de la esclavitud, el hambre y la miseria.

Esta es la mayor crítica fundada contra sus mentiras, farsa e hipocresía. Históricamente los hechos lo prueban en Rusia, China, Corea del Norte y Vietnam o Cuba, Venezuela y Nicaragua, entre otros. 

En contradicción con su profesión de fe juarista que propugna por vivir en la honrosa medianía, AMLO y el gobierno de la 4T ataca cotidianamente en los últimos tiempos a la clase media.   

El gobierno de la 4T, a través de sus legisladores federales agudiza las contradicciones objetivas y subjetivas de la sociedad mexicana, para imponer un régimen autocrático, autoritario y dictatorial.

La estrategia para conseguirlo es muy simple y sencilla, pauperizar y proletarizar a la clase media. Los pobres viven ya de la mano del gobierno de la 4T, a través de los programas sociales.

Y los ricos, al igual que con los gobiernos de la vieja mafia del poder del PRIAN, son amigos, socios y cómplices de la nueva mafia del poder en el gobierno del Movimiento de Regeneración Nacional. 

En el rotundo fracaso, sobre todo económico, del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador lo que estamos viendo y viviendo es que los ricos son más ricos y los pobres más pobres.

Genial animal político, Andrés Manuel López Obrador capitaliza políticamente a su favor las miserias humanas y la idiosincrasia del mexicano, dado a la ley del menor esfuerzo y a la dádiva.

Condición indispensable es, entonces, destruir a la clase media, convertida en el último enemigo a vencer por ser libre de pensamiento y acción e independiente económicamente al crear riqueza.

El presidente Andrés Manuel López Obrador fiel a su consigna de polarizar a los mexicanos para dividirles y enfrentarles, embiste permanentemente en las mañaneras a la vituperada clase media.

Ha pasado de llamarles conservadores, racistas, clasistas, discriminantes, a responsabilizarles de propiciar el nazismo y la dictadura de Pinochet en Chile por haber estado “mal informadas”.

Ataca a los medios por “manipular” a este grupo tras la caída de Morena en las elecciones del 6 de junio en los grandes centros urbanos y perdiera 9 de las 16 alcaldías de la Ciudad de México.

En tres años de la 4T hemos visto en el Congreso de la CDMX y en el gobierno ataques contra la clase media, como el aumento al predial o las iniciativas por la plusvalía de los bienes inmuebles.

Alrededor del 42 por ciento de los impuestos recaudados en México provienen de los estratos de ingresos medios. La clase media paga, por tanto, varios impuestos más que la clase rica.

El ejemplo es el impuesto al valor agregado (IVA), segundo gravamen más grande de México. Las clases medias pagan en promedio 7.2 por ciento de su ingreso, y la clase alta solo el 6,8 por ciento.

El caso de la seguridad social es particularmente grave. Los estratos sociales de clase media no solo pagan la mayoría de las cuotas, sino que son víctimas de reducciones a sus salarios por estas.

Las cuotas de seguridad social reducen el salario de los trabajadores, sobre todo de clase media, hasta en un 67 por ciento porque los patrones ajustan las remuneraciones a la baja para cubrirlas.

Con la perversidad que le caracteriza, el presidente López Obrador anunció una reforma fiscal que terminará siendo sostenida en la espalda de la clase media y alimentada con nuevos impuestos.

El gran enemigo de la 4T es la clase media, y la consigna contra esta es destruirla y desaparecerla. Ya no sabe de dónde sacar dinero y exprimen a los contribuyentes cautivos clasemedieros.

En la lógica dictatorial, lo que predomina es la clientela electoral sobre el ejercicio del derecho, y eso es una clara regresión en un país como México que era un lugar de libertades, después del 97.

Frente a ello, la solución radica en exigir respeto al Estado de Derecho y a las leyes consagradas en la Constitución, para combatir la corrupción con hechos, no con simples palabras demagógicas. 

Luchar cotidianamente por demandar que, en un acto de estricta justicia, los ricos que tienen más recursos que los pobres paguen más impuestos y combatir eficazmente la creciente informalidad.

En la vida de la real politik, lamentablemente, los principales y mayores ricos de México forman parte del Consejo de Asesores del presidente López Obrador, haciendo negocios con el poder.

Beneficiarios son Ricardo Salinas, presidente de Grupo Salinas, TV Azteca, Banco Azteca y Elektra; Bernardo Gómez, vicepresidente ejecutivo de Televisa; Olegario Vázquez Aldir, director general de Grupo Ángeles, hoteles, servicios financieros y medios.

Carlos Hank, director general de Banorte; Daniel Chávez, dueño de Grupo Vidanta; Miguel Rincón, presidente ejecutivo y director general de Biopapel, Miguel Alemán Magnani y Sergio Gutiérrez Muguerza, presidente de la compañía Deacero.

 

alfredo_daguilar@hotmail.com

director@revista-mujeres.com

@efektoaguila