Peña Nieto el avorazado pre-pre-precandidato a Los Pinos, tiene esa característica propia de un indeciso o alguien con complejo de culpa.
En el extraño caso de su primer consorte, pasaron varios meses después de su insólito trastabilleo ante un reportero televisivo gringo que le preguntó la causa de la muerte de su esposa. Se demudó y tartajeó como pocas ocasiones se ha visto. A menos que estén tocando un tema que, inexplicablemente no conoce. No es comprensible que la muerte súbita de la Sra. Peña la autopsia no dejara en claro la causa. Ahora, meses, ¿cuántos?, después acude al mismo entrevistador y lleva el expediente clínico del deceso. ¿Por qué ese atraso, por qué la inseguridad de quien debió ser el mejor informado? Ese tema será motivo de exhumación, el tema no el cuerpo, en la campaña pre-electoral que continuará la que sostiene en las televisoras, por hacerse de Los Pinos.
Peña Nieto no tiene carrera política. Sus antecedentes son BUROCRÁTICOS, en los que tapó las sinvergüenzadas de su tío Arturo Montiel. Recordemos que él ocupaba un puesto segundón pero clave para hacer la labor propia de los “gatos” ¡tapar la suciedad! Su carrera política se fincó, diría Doña Borola, en “su feis”. Cero ideas, cero programas, cero propuestas de fondo para manejar la entidad con mayor presupuesto después del DF. En esos años, un reportero le preguntó quién fue “El Rey Poeta” No lo supo. Tampoco sobre los autores del Himno Nacional.
Bueno, la ignorancia de Peña Nieto sobre la historia patria, en temas de conocimientos elementales, no importó a su partido, el PRI, que ansía regresar a Los Pinos. ¿Para qué? Ahí el dilema. Presumir como los priístas por que “ellos si saben gobernar” no es suficiente. Los últimos presidentes de la república provocaron que se dijera que el PRI era idéntico a Pedro Domecq ¡por que cada vez les sale p…eor el Presidente! Don Miguel, un patético caso de grisura, ¡durante varios años fue el ícono del PRI!. Años después escenificó una patochada con Salinas de Gortari. Éste, supuestamente rehabilitado lo substituyó en el PRI como “gurú” y de paso lo hizo callar de manera ignominiosa. Salinas, que abusó de la presidencia y a quien Téllez Khuenzler denunció como quien “se llevó” a casita la partida secreta de la presidencia. La panacea salinista: el TLC. Ante los resultados para el país, ahora dice Salinas que fue un proyecto y no una panacea. ¿Recuerdan cuando anunció superado el problema de la deuda y que los mexicanos debían en casa interpretar el Himno Nacional? Ridiculeces de un autócrata. El último “faraón” priísta, Zedillo, entregó el mercado interno alimentario a las trasnacionales y desarboló los restos de un gobierno que participaba en la economía. Como Salinas, vendió a precio de ganga las restantes empresas públicas a amigotes y a empresarios yanquis con los que cínicamente se fue a trabajar después de haberles puesto la mesa: la economía nacional.
Después de esos 18 años nefastos, ahora el PRI pretende regresar con mayores bríos ¿a qué? A continuar con el corporativismo gerontocrático con “jovenazos” como Gamboa Pascoe, Heladio Ramírez y Gamboa Patrón, éste dolido aún con el “bailador” Moreira. Dueño y señor” de Coahuila al grado de heredar la gubernatura a su hermano, le pegó una felpa y le ganó “dándole un baile” grillo.
Volviendo a Peña Nieto, después de la tardanza en aclarar la muerte de su primera esposa, repitió la dosis. Ante el reclamo de un grupo de mujeres por los múltiples feminicidios impunes en el Estado de México, primero adujo que “eran denuncias preelectorales sin validez alguna” Las desdeñó. Pero ante las denuncias reiteradas procedió a realizar un “Foro” Otro más de tantas reuniones que ha promovido para pasar por un reflexivo gobernante, un intelectual de polendas. Lamentablemente hay quienes le hacen el juego. Después de ese “Foro” que le reveló que los feminicidios no podía hacerlos de lado en su frenética carrera por Los Pinos, concluyó creando una Subsecretaría o Sub procuraduría que se encargará de esos casos. Pero, no significó avance alguno en las investigaciones de los feminicidios anteriores. La impunidad se mantiene. Pero parece que a “Quique” lo persiguen fantasmas femeninos.
Don “Quique”, en su caligulesco afán por llegar a Los Pinos, pone en juego todos los días su “feis” para recibir los elogios de damas carentes de pareja o pletóricas de lujuria insatisfecha que se vuelcan sobre el hombrecito de Toluca. Don Enrique Peña es congruente. No aporta idea alguna de cómo recuperar la economía nacional y atenuar la brecha entre grupos sociales que explica la injusticia, la pobreza, la emigración y el hambre. Suma fotos, fotos, fotos, de su vida privada. Pensando que en México se puede representar una versión holliwoodesca del político ignorante, dispuesto a todo con tal de llegar a Los Pinos. De paso su origen ¿será el Opus Dei? Peña Nieto es la mejor inversión de las televisoras; Azcárraga y Salinas ¡otro Salinas!, han puesto su futuro en el toluqueño heredero de Hank González y retoño de toda una plaga de exdesgobernadores del sufrido Estado de México. Otro retraso de Peña Nieto: ¡es tan popular su heredero al trono mexiquense que aún no se sabe quién será candidato del PRI! Cualquiera es bueno; la meta son Los Pinos, “haiga como haiga sido”.
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