Oaxaca es un estado estratégico para el comercio y la capacitación, predomina la población indígena de 16 grupos étnicos. Culturalmente, gran parte de sus comunidades se rigen por usos y costumbres, donde la población se caracteriza por su apego a su cultura originaria que data de muchos siglos. Oaxaca también es una entidad joven y por ello la mayor parte de este sector de la población se encuentra en edad productiva, es decir, que tienen la capacidad de ampliar sus conocimientos por medio de la capacitación y educación. Una combinación virtuosa: una rica cultura originaria más población joven, creativa y fuerte.
San Martín Tilcajete es un municipio modelo de los Valles Centrales; cientos de familias viven del comercio y las arteanías, muchos de ellos venden su producción a intermediarios, ya que no cuentan con sistemas de comercialización ni con procesos de transformación. Los microempresarios de esta microregión son personas de 30 a 60 años. De ellos, el 65% comercializa sus artesanías con la experiencia que ha obtenido en los años que llevan en el negocio. Estos microempresarios son personas de la comunidad con un grado de estudios máximo de secundaria y bachillerato. Al ser en su mayoría microempresas familiares, el dueño, es el gerente y administrador y en ocasiones apoya a los procesos de producción. Lo anterior representa una enorme ventana de oportunidad para trabajar de la mano con ellos y desarrollar sus habilidades para que proyecten su noble labor y mejoren su ingreso.
En Tilcajete, el Gobierno del Estado de Oaxaca está impulsando una transición de las microempresas familiares a estructuras modernas de organización, que permitan crear valor agregado a sus productos y tener participación en los mercados con ventajas competitivas, basadas en la creatividad, capacitación y la innovación. Las micro, pequeñas y medianas empresas artesanales, en el contexto de la globalización, se convierten en una alternativa válida para muchas comunidades de Oaxaca, en donde a través de la cultura se genera empleo. Las mipymes pueden generar nuevas dinámicas laborales en las regiones del estado y demostrar que la capacitación y el acompañamiento de las instituciones transforma la vida de las familias. La estrategia sucede en dos momentos: la capacitación de la gente y el asesoramiento para que emprendan, formalicen o mejoren sus negocios. Al lado de la Secretaría de Economía, el Instituto del Emprendedor y el ICAPET desarrolla sus acciones en favor de quienes más lo necesitan.
Así como estamos innovando en el emblemático San Martín Tilcajete, en otras comunidades del estado hay un gran potencial que deberá aprovecharse. La variedad de climas, ecosistemas y entornos ofrece ventajas comparativas que pueden aprovecharse desde el ámbito local y estableciendo alianzas con actores nacionales e internacionales. Sobre todo considerando el gran valor de nuestras artesanías que continuamente son premiadas en los premios nacionales de arte popular con los primeros lugares. Aunado a estos casos de éxito que inspiran, el dato relevante es que la adquisición de artesanías representa más del 4 % del PIB que genera el turismo en México, por lo que los gobiernos deben estar comprometidos con su conservación, difusión y comercialización.
El proyecto de mipymes artesanales en Tilcajete se diseña en favor del desarrollo económico y el empleo, la producción de artesanías toca todos los campos del desarrollo humano: cultural, social, educativo y económico. Expresiones culturales únicas que se deben convertir en negocios para habitantes y pueblos originarios de nuestras comunidades.
Oaxaca tiene una producción artesanal única en el país, somos el estado más representativo en cuanto a producción artesanal; barro negro, cerámica, chillería, madera tallada, orfebrería, joyería, talabartería, textiles y por su puesto los alebrijes, famosos en México y el mundo que dan muestra de la creatividad y el ingenio de nuestra gente, elaborados de árbol de copal. Tenemos grandes representantes como Carlomagno Pedro Martínez en el barro negro y Jacobo y María Ángeles con su taller de alebrijes que se ha convertido en referente internacional. Y nuestras artesanías no solo deben significar una veta cultural sino también una posibilidad de autoempleo bien remunerada.
Para continuar impulsando el desarrollo de las MIPYMES, en Oaxaca conviene establecer alianzas con el sector privado y pensar en estrategias integrales que unan nuestros valores culturales con los espacios comerciales adecuados, que brinden opciones de participación en mercados internacionales y que sobre todo se reflejen en una mayor calidad de vida para quienes con sus manos mágicas hacen sueños realidad. Pensemos en todas las familias que viven de crear con su imaginación piezas únicas que son orgullo de nuestro pueblo y cautivan a públicos de distintos continentes. Oaxaca vive en sus artesanos y en Tilcajete empiezan una nueva etapa que estoy seguro que será exitosa.
*Director General del ICAPET Oaxaca