Mal, pésimo augurio que Cordero haya difundido que México puede resistir una salida de capitales ante el alza de la tasa de interés en EUA. Esa decisión de los yanquis elimina la “ventaja” que México tenía con su elevada tasa de interés con la que estuvo capturando “capitales golondrinos” y no inversión extranjera directa. En otras apalabras, “se acabó el teatrito”. Las reiteradas declaraciones sobre “la confianza de inversionistas extranjeros en la fortaleza de México”, se revelan ficticias. El ingreso de capitales “golondrinos”, elegantemente llamados “inversiones en cartera”, es producto de una tasa de interés por arriba de la de otros países. La tasa de interés mexicana al encontrar competencia en la tasa norteamericana, aboca al país a una salida, ¡ojalá no sea “hemorragia” de capitales!. Los capitales “golondrinos” son solo transferencias de capitales con estrictos propósitos especulativos. Ante riesgos mayores en el país que los reciben o mayores tasas de interés en otros países como ahora se suscita en EUA, ¡adiós Nicanor! La amenaza de una devaluación de peso, nos llevaría a una pésima situación: sin recuperarnos de la crisis reciente-como lo puntualizó el Banco Mundial- con un mercado alimentario ahogado por los precios internacionales de los granos y la improductividad rural, ahora sí que podríamos decir ¡éramos muchos y parió la abuela!
La situación se revelaba ya crítica en 2010 Los “capitales golondrinos” que ingresaron al país por 25,700 millones de dólares rebasaron a la Inversión Extranjera Directa que sumó 17,500 millones de dólares. Ésta última es la que se invierte, opción aceptable al crear nuevas plantas industriales u opción negativa, comprando las fábricas existentes, pues no amplía la planta industrial ni los empleos.
La expansión de “capitales golondrinos” se revelaba preocupante: expresaba las tendencias especulativas del mercado de capitales en México. Más aún, desde el año pasado en enero, la ONU sugirió “tener cuidado” con la catarata de “capitales golondrinos”
Por si fuera poco, los antecedentes de agresiones especulativas contra países industrializados, revelan lo que puede acontecer en el nuestro. Recordemos que en 1992 bajo la batuta del “zopilote de las finanzas internacionales” George Soros, el húngaro que llegó a especular en el mundo occidental, Inglaterra estuvo en punto de quiebra. Los trastupijes especulativos del magyar llevaron a millones de trabajadores a la indigencia en ese país y las reservas británicas no soportaron la ola especulativa. Así un auténtico personaje del “Mercader de Venecia” de Shakespeare, emergió en el mundo financiero: de avaro a “financiero de altos vuelos”.
El pasado acusa: el mismo Soros, contrito, tuvo que reconocer hace cosa de 5 años que él ha sido un especulador. Aunque como tantos avaros, logró ponerse la piel de “filántropo” e incluso creó “Transparencia Internacional” que califica la nitidez de los manejos gubernamentales en múltiples países del mundo. ¡Un atracador de etiqueta impartiendo cátedras de ética! “Transparencia Internacional” se multiplicó y en México apareció su “sucursal” que en garras de los “hermanitos” Reyes Heroles-González Garza, los que tienen ¡dos padres y dos madres!, les permitió hacer pingües negocios. Entre otros el de “calificar” la “transparencia” de la Comisión Federal de Electricidad que entre otras linduras reveló las malversaciones de un grupo de sus empleados de mayor vuelo que fue premiado por los proveedores de CFE con un yatecito y otros “regalitos”, La “transparencia” de los “hermanitos” Reyes Heroles-González Garza, ante ese saqueo no dijo pío.
Volviendo a la economía mexicana y su “blindaje a toda prueba”, las declaraciones de Cordero de Hacienda, nos pone la carne de gallina: chinita. El pueblo tiembla cuando se reitera la “solidez d las finanzas públicas” En más de una ocasión han preludiado una devaluación, un “error de diciembre” o un nuevo endeudamiento del país. Al respecto Cártens el del “catarrito” que se tornó pulmonía y significó un desplome del PIB por 7% y ahora revela la sugerencia que le hicieron de “poner cara de idiota, antes que decir una idiotez”, este sujeto ha reiterado la “magia” de su estrategia financiera: acumular, acumular y acumular dólares para “blindar” a México de una crisis. De una avizorada huída masiva de capitales.
Estos supuesto “gurús” de la “economía de los zombis” se niegan a reconocer que el mejor “blindaje” económico, descansa en la creación de empleos y plantas productivas nacionales competitivos, en la ampliación del mercado interno, en la menor dependencia de lo que acontece en la economía de EUA y en fin, en una economía dinámica. Ante la crisis exterior, volver los ojos al país y aprovechar sus potencialidades productivas y ocupacionales, en lugar de “poner cara de idiota antes que decir una idiotez”.
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