Denuncian que se intenta demoler al PRI en Oaxaca: Alfredo Martínez de Aguilar

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* Priistas escuchan de algunos funcionarios y sedicentes líderes políticos que existe la intención, inminente, de designar en la dirigencia estatal del PRI a Sofía Castro y a Eviel Pérez Magaña.
* Revelan que está documentado que Sofía y Eviel jugaron las contras a Alejandro Murat al votar por Ivonne Ortega y no por Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas, a quien apoyó el gobernador.

Un grupo de priistas de hueso tricolor nos hicieron llegar un documento con una serie de reflexiones sobre el futuro inmediato del PRI que, por su trascendencia política, damos a conocer en esta entrega.

A decir de la propia militancia priista, existen sentimientos encontrados por la intención velada de extinguir lo que queda del Partido Revolucionario Institucional en Oaxaca. “¿Por qué hay desde el poder la intención de demoler al PRI en Oaxaca?”, se preguntan.

Priistas de viejo cuño han escuchado de algunos funcionarios y sedicentes líderes políticos que tienen acceso directo al Palacio de Gobierno que existe la intención, inminente, de designar en la dirigencia estatal del PRI a la controvertida política Sofía Castro Ríos.

La Secretaria de Desarrollo Agropecuario, Pesca y Acuacultura del Gobierno Estatal, sustituiría a Jorge González Ilescas como Presidenta del CDE del PRI e impulsarían la designación del ex Secretario de la extinta Sedesol, Eviel Pérez Magaña, como delegado general del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del partido tricolor en Oaxaca.

Ante tales hechos, porque solo es cuestión de tiempo, la desmoralizada militancia del todavía PRI-gobierno en el estado, se pregunta “por qué existe tanta saña en contra del instituto político que les permitió alcanzar al poder a todos”.

La pregunta no resulta exagerada, a partir de algunas cuestiones que, dice el documento de referencia, vale la pena considerar. Por ejemplo, el hecho que “entre los personajes que han hecho todo para desprestigiar al PRI y para dividir a la militancia, destaca Sofía Castro Ríos”.

Recuerdan que “en los últimos años esta última, se ha caracterizado por servir de ariete contra los gobernantes en turno, y de haber ido sembrando enconos y recelos entre los sectores sociales y políticos con los que ha tenido contacto”.

Al mismo tiempo, denuncian que “está documentado que Sofía Castro Ríos y Eviel Pérez Magaña jugaron las contras al gobernador Alejandro Murat Hinojosa al votar por Ivonne Ortega Pacheco y no por Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas, a quien apoyó el mandatario estatal”.

“Entre los últimos cargos de Sofía destaca la diputación local que no ganó, sino que le vino de rebote; además de su gris paso por la Secretaría de Asuntos Indígenas y su reciente arribo a la SEDAPA, en donde nadie ha dicho nada de su trabajo, porque ella ha hecho exactamente lo mismo, nada”.

Pareciera, entonces, que la intención del cambio no tendría que ver con la conciliación entre grupos, máxime, ahora, que hubo el importante reacomodo en el ámbito nacional, que debiera impulsar la revitalización de las estructuras priistas en todos sus niveles, sino con la erradicación de lo que queda de la credibilidad entre la militancia.

Señalan que “el caso de Eviel es aún más paradigmático: recién en la elección de la nueva dirigencia nacional del PRI, intentó construir la idea que, gracias a él se había ganado la elección interna y que él y su grupo, los ulisistas tránsfugas que, ahora, frente a la desmemoria, quieren mimetizarse como muratistas de cepa, fueron los que movilizaron a toda la militancia oaxaqueña para que se volcara en las urnas a favor de Alito Moreno Cárdenas”.

“Nada más alejado de la realidad, porque las cifras y los mecanismos de movilización fueron los mismos que se han utilizado en todos los procesos electorales en donde los márgenes de votación se pueden pesar y medir, como pasa entre los ya conocidos alquimistas electorales del priismo que pueden comprobar su trabajo de campo”.

“Pero como las victorias están llenas de padres, también los evielistas se adjudicaron el triunfo de “Alito”, a pesar que apoyaron a Ivonne Ortega y con esa zanahoria quieren lograr la entrega de la dirigencia priista de Oaxaca, para la que Sofía Castro sería solo un peldaño de transición para el arribo final de Eviel”.

“¿Qué esperan de Eviel? ¿Que traiga a Oaxaca, y al priismo local, la persecución judicial que le espera por su involucramiento en la Estafa Maestra por la que ya está en prisión Rosario Robles? ¿O incluso, con la dirigencia tricolor, intentarán extenderle un pequeño manto de impunidad que de todos modos no le servirá de nada?”, se cuestionan.

“¿Frente al exacerbado ánimo revanchista de AMLO y su 4T, creen que servirá de algo? ¿Tanto vale Eviel como para intentar protegerlo a costa del priismo oaxaqueño y la inminente disputa por el poder que ya está corriendo en la sucesión adelantada del gobierno de Oaxaca?”.

Precisamente por eso, los militantes están preocupados y ya no saben si reír o llorar ante las evidencias que desde el poder se intenta demoler lo poco que queda del priismo oaxaqueño. Al tiempo.

 

alfredo_daguilar@hotmail.com

director@revista-mujeres.com

@efektoaguila