Aumentan 5 mil 400 hectáreas de cultivo de amapola en México

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Entre 2015 y 2016 la superficie cultivada con amapola en México alcanzó 25 mil 200 hectáreas mientras que, en el siguiente periodo, 2016-2017, se registraron 30 mil 600. Así, el cultivo de la adormidera aumentó 21 por ciento en el país entre los dos periodos, lo que representa un incremento neto de 5 mil 400 hectáreas, de acuerdo con un reporte del la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC por sus siglas en inglés) elaborado en coordinación con el gobierno de México.

Los resultados del reporte estuvieron basados en la interpretación visual de imágenes satelitales de alta resolución espacial y misiones de verificación de campo terrestres y aéreas. En el texto se precisa que un estudio previo había encontrado 26 mil 100 hectáreas entre julio de 2014 y junio de 2015. Sin embargo, estos valores no son comparables con estimaciones posteriores, debido a una profundo cambio en la metodología.

Los cultivos de amapola se observan principalmente en la Sierra Madre Occidental, concentrado en el triángulo donde se encuentran los estados de Sinaloa, Chihuahua, Durango y el norte de Nayarit; así como en los estados de Guerrero y Oaxaca en la Sierra Madre del Sur.

El gobierno de México informó -con datos de la Procuraduría General de la República- que 26 mil 426 hectáreas de adormidera fueron erradicadas en 2015; 22 mil 436 en 2016 y 29 mil 692 hectáreas en 2017.

En el texto la UNODC explica que no hay una sola causa que pueda explicar el aumento del 21 por ciento en el cultivo entre 2015-2016 y 2016-2017. La investigación de campo en Afganistán y Myanmar ha demostrado que los impulsores subyacentes del cultivo de la adormidera son múltiples y variados, incluida la pobreza, las escasas oportunidades de empleo, la falta de servicios de salud, educación y servicios financieros, el acceso limitado a los mercados y los problemas relacionados con el estado de derecho y la seguridad.

Sin embargo, destaca la oficina de la ONU, hasta la fecha poco hay información disponible sobre la situación socioeconómica de las comunidades rurales de cultivos ilícitos en México.

Al presentar el documento, Antonino De Leo, Representante de la Oficina de Enlace y Partenariado (LPO por sus siglas en inglés) de la UNODC en México, instó a las autoridades nacionales, en coordinación con las estatales y locales, a adoptar nuevos enfoques y estrategias más integrales de control de cultivos.

Fuente: jornada.com