Semanas después, apenas, del escándalo en que se vio involucrado tras revelarse la posesión de media docena de costosos inmuebles en Estados Unidos por parte de él mismo y de algunos familiares cercanos, el priista José Murat Cassab parece estar de vuelta en la arena política, aunque no con el propósito de esclarecer lo publicado porThe New York Times sino, esencialmente, con la explícita intención de reposicionar la afectada carrera de su hijo Alejandro, en pos de la gubernatura de su natal Oaxaca.
Ello, al menos, es lo que se afirma hoy en cuanto corrillo político ocurre en la otrora bella y apacible Antequera donde, particularmente después de concluir el foro Reforma Político Electoral en Oaxaca. Retos y Soluciones, convocado por el Congreso estatal y el Organismo Público Local Electoral (OPLEE) de la entidad, propios y extraños dan por hecho que la referida reforma acabará siendo aprobada… ¡para que el próximo gobernador, el que supla al (inexistente) Gabino Cué Monteagudo, sea electo para un periodo de sólo dos años!, bajo el (sólido) argumento de “empatar” la selección del mandatario local con la del Presidente de la República.
La sola posibilidad de que, a mediados de 2016, la ciudadanía oaxaqueña deba elegir a un gobernador para un periodo tan corto, ofrece al cuestionado exgobernador, insisten las versiones, el tiempo suficiente ya no sólo para aclarar el asunto de los inmuebles cuya propiedad, con o sin razón, se le imputan en territorio norteamericano sino, incluso, para relanzar el proyecto de que el actual director general del Infonavit, su vástago, consolide su posicionamiento de cara a buscar “ya no el próximo año, sino en junio de 2018”, la gubernatura de la sufrida entidad rehén hoy de las hordas de supuestos maestros, vándalosen realidad, de la Sección 22 de la impresentable CNTE.
De cara a la concreción de tal posibilidad, aseguran fuentes cercanas al titular del (des)gobierno estatal, el grueso de los diputados de la actual LXII Legislatura que preside Leslie Jiménez Valencia, no pocos de la oposición incluso, habrían signado ya acuerdos en el sentido de imprimir mayor celeridad a los trabajos orientados a concretar la reforma política anunciada de manera tal que, ello mismo, no sólo contribuya a posibilitar el cambio de periodo a cumplir por el próximo gobernante estatal sino, incluso, para avanzar en la adopción de medidas que “cancelen riesgos de cara a los comicios de junio venidero”.
Contraataca Murat Casab, pues, y dada su incuestionable habilidad y absoluta carencia de apego a regla alguna en eso que muchos identifican como la lucha (política) en lodo, más de uno en Oaxaca y a nivel federal inclusive, se encuentra preocupado… y con razón, habría que decir…
ASTERISCOS
* Ahora sí que, tal como se previó desde un primer momento, aunque con mucho mayor celeridad de lo que cualquiera pudo haber previsto, la celebrada (y pragmática) unidad entre expanistas vinculados al campo a través de UNIMOSS y liderados por Javier López Macías, e izquierdistas y sindicalistas blancos liderados por Ignacio Irys Salomón y Eduardo Espinosa para dar forma al Partido Humanista, acabó hecha añicos…
Veámonos el miércoles, con otro asunto De naturaleza política.