La semana pasada recibí una atenta invitación del Senador Eviel Pérez Magaña, me participaba que rendiría su 3er informe de actividades como legislador de la República ante los correligionarios de su partido y los sectores que lo integran como la CROC, la CNC, la CNOP, las mujeres de ONMPRI, etcétera, así como los comités municipales que simpatizan con él y que militan en el mismo partido, y el público en general.
Conozco desde hace varios años a Eviel. Conozco su trayectoria política, su trabajo como funcionario público, de su esfuerzo como empresario y de su experiencia legislativa al haber sido diputado federal en dos ocasiones y ahora senador por el estado de Oaxaca. En el Senado preside la Comisión de Asuntos Indígenas. Sé de él y de su disciplina partidista; por cierto, recuerdo que habiendo jugado en la pasada elección como candidato del PRI para gobernador del estado, la fortuna política veleidosa en ocasiones le fue adversa. La elección se perdió y con ello la plaza fue ganada por un cuadro político que había sido Presidente Municipal de la Capital Oaxaqueña, Gabino Cué, ahora gobernador de Oaxaca.
Supo ser prudente y aguantar el golpe y con ello, dejar para otros tiempos el sueño de todo oaxaqueño bien nacido: gobernar su estado. No fue fácil aceptarlo, hubo que ir madurando las decisiones adversas que en ocasiones impone la política y aceptar la decisión de la cúpula partidista pero sin rendirse, por el contrario, continuar la lucha en esa arena que no acepta pusilánimes, solo cuadros decididos a no rendirse.
Muchas cosas pasaron, y como casi en todo sucede; las cosas y las situaciones se fueron acomodando; poco a poco se fue entendiendo que el triunfo del PRD-PAN-Convergencia y su ejercicio de gobierno no correspondía con las promesas de campaña puesto que los problemas en Oaxaca fueron aumentando y con ello, diluyéndose la autoridad y el poder del gobierno de Gabino Cué frente a las tremendas presiones y demandas de la Sección 22 de la CNTE; recuerdo como la plaza del zócalo de la ciudad siempre estuvo secuestrada por los manifestantes, con todos los perjuicios que esto causa. Incluso, se llegó a sentir y sufrir la anarquía reinante en la ciudad capital del estado porque así lo había decidido la pandilla de la 22 de la CNTE cuando era dueña y señora de todos los dineros, plazas, becas y escuelas del IEEPO en el Estado.
Así se las gastaban esos delincuentes; y si el gobernador Cué no accedía a las demandas o el propio Secretario de Educación, Emilio Chuayffet Cheymor, no hacía caso a las exigencias económicas de la 22 por no ser de su competencia – según lo expresado por el entonces Secretario – entonces la pelota rebotaba a la Secretaría de Gobernación. Allí, “si se resolvía”, ¿pero saben cómo? Pues aumentando las presiones y chantajes de todo tipo, tomando las calles y avenidas de Oaxaca, destrozando ventanales y cajeros automáticos, pintarrajeando casas y paredes, suspendiendo clases y dejando sin ellas a millón y medio de alumnos. De no ceder a las exigencias, enviaban contingentes a la Ciudad de México con la consigna de arrasar las calles, desquiciar la vida de la ciudad capital y destrozar como hordas de Atila todo lo que encontraran a su paso. Así, transcurrieron los cinco años del actual gobierno y tiempos de gobiernos anteriores, también aguantando las arremetidas de la bufalada de la CNTE. Pero, no hay mal que dure para siempre y el dicho se cumplió al haberse aprobado las reformas como la educativa que está en plena marcha en todo el país y con ello el fin del poder de la pandilla magisterial que tenía secuestrado al estado.
Si, en efecto, las cosas y las situaciones se han ido acomodando, también para Eviel según pude comprobar en el lugar donde fue el acto del 3er informe legislativo del senador, les cuento:
Desde la semana anterior al acto que se me había invitado, en mis diversos recorridos por la capital Oaxaqueña y el Estado, pude observar varios espectaculares gigantescos con la fotografía de Eviel anunciando el acto político del que sería la figura principal. ¡Ha caray! ¿Informe legislativo o pre lanzamiento de su candidatura? Me pregunté…
El día del evento, llegué al lugar una hora, más o menos, antes del acto y si “el vaso estaba medio lleno”, muchas sillas reservadas para los diputados locales, los federales, las de los senadores, y diversos personajes importantes con los “personificadores” en el respaldo. Las sillas de los invitados distinguidos no se ocupaban todavía pero, poco a poco esto fue cambiando. Llegaron los empresarios de la COPARMEX y CANACO; la CROC muy alegre, haciendo ruido y disfrutando el “calentamiento del acto”; lo mismo la CNC; las “flores de piña”, mujeres de doña Tere y doña Chepi que no paraban con sus consignas muy bien armadas y también muy alegres. El acto se vestía como en los tiempos ya idos del entonces “invencible partidazo”; que como máquina devoradora de hombres y mujeres los sacrifica en ocasiones y en otras los eleva sin razón alguna.
Platicando con Eviel me comentó que esperaban unas 3 mil 500 personas no obstante, la sorpresa y mi conteo personal arrojaron casi 6 mil asistentes; al día siguiente los periódicos locales confirmaron mi apreciación. Eviel, leyó su informe legislativo, me llamó la atención el énfasis que puso en su discurso en torno de la unidad partidista cuando convocó a todas las fuerzas políticas del estado y a los funcionarios del INFONAVIT, de LICONSA y del INAES para que se sumaran a la cruzada que él encabeza y juntos enderezar el rumbo de Oaxaca, a efecto de poner fin a la larga noche de un gobierno estatal sumido en el desencanto y el descrédito. “Los invito a luchar juntos en un solo bloque, más allá de los liderazgos y nombres, hacia una cita histórica por el bien de Oaxaca”.
Finalmente, sorprendente fue la asistencia de diputados locales y federales como senadores. representantes del los líderes partidistas del PRI, tanto del Senado como de la Cámara de Diputados. El presidente del PRI en la entidad, también amigo, hizo acto de presencia para acompañar a Eviel; Presidentes municipales, Delegados Federales vistieron con su presencia el acto. La jornada se remató con otro evento en el que se esperaban 200 personas pero, según una chica que atendió la mesa que compartí con miembros de la COPARMEX, la asistencia fue de 500 comensales por lo que no se daban a basto con los moles, las sopas y las memelas, tuvieron que cocinar 2 veces más para poder atender a más del doble de los invitados esperados.
Pues nada más, los eventos, a los que fui amablemente convocado, llegaron a su final y como siempre ha sucedido, mi estancia en Oaxaca significa volver a la calma, a los cielos limpios, a disfrutar del tiempo que siempre te alcanza para hacer la tarea del día como en esta ocasión fue el atender la atenta invitación de un amigo como lo es, Eviel Pérez Magaña.
Twitter: @luis_murat
Facebook: https://www.facebook.com/luisoctaviomurat
Blog: https://luisoctaviomurat.wordpress.com