Caracas.– El vicepresidente de Venezuela, Tareck El Aissami, ingresó hoy sin aviso al Palacio legislativo, desconociendo la autoridad de la directiva de la Asamblea Nacional, de mayoría opositora, que denunció la presencia del funcionario como un “asalto” en el Día de la Independencia.
Los diputados calificaron la llegada de El Aissami, quien estuvo acompañado del ministro de Defensa, Vladimir Padrino, y de otros funcionarios, como un intento de apropiarse de los símbolos nacionales.
Sin informar a la directiva de la Asamblea Nacional (Congreso), el grupo de funcionarios llegó para exhibir el Acta de la Independencia firmada por los próceres el 5 de julio de 1811 y ofrecer un discurso en ausencia de los diputados.
Los funcionarios estuvieron acompañados por simpatizantes del Gobierno del presidente venezolano Nicolás Maduro, vestidos con camisetas rojas.
El Aissami reiteró el propósito de la Asamblea Constituyente, convocada por el presidente Maduro, cuyos 545 miembros serán elegidos el próximo 30 de julio: disolver la Asamblea Nacional de mayoría opositora.
El vicepresidente dijo en su arenga que el proceso constituyente convocado por Maduro “sellará la independencia” del país en el siglo XXI.
Exaltó la lucha “heroica” de la Fuerza Armada en estos momentos, durante las protestas contra el Gobierno, que ya cumplieron tres meses.
“Aún no hemos terminado de romper amarras con los imperios. Nuevas fuerzas oscuras se abalanzan contra nuestro pueblo, pero el 30 de julio vamos a decidir soberanamente y el proceso Constituyente sellará la independencia de este siglo XXI”, señaló.
Antes, El Aissami invitó al pueblo a asistir a unos espacios, que afirmó, estaban “secuestrados” por la “oligarquía”.
Los representantes del Ejecutivo se retiraron y luego los diputados ocuparon sus asientos para la sesión especial por el “Día Nacional”, que tuvo como oradora a la historiadora Inés Quintero.
Los legisladores, con la bancada oficialista vacía, denunciaron lo que llamaron un “asalto” a la Asamblea, ya que no fueron avisados de la presencia de los ministros.
“Hoy, 206 años después de esa decisión de ser una República civil, existe un dictador que conspira para destruir la nación”, señaló el presidente de la Asamblea, Julio Borges.
“Hoy es un día especial para todos los venezolanos que luchamos por la libertad de nuestro país. Muy pronto, mediando las luchas, estaremos en libertad y las armas se rendirán ante las magistraturas civiles”, agregó.
El presidente de la comisión de Política Exterior, Luis Florido, dijo que grupos violentos dirigidos por El Aissami y el ministro del Interior, Néstor Reverol, entraron de manera inesperada al recinto de la cámara legislativa y ocuparon la sede legislativa.
“Venezuela va a recuperar su independencia y salvarla de estos malandros (delincuentes)”, afirmó.
En los alrededores de la Asamblea Nacional estuvieron amenazando grupos simpatizantes del Gobierno que lanzaron petardos hacia los jardines del palacio legislativo y amenazaron con un nuevo “asalto”.
Mientras, Maduro encabezó el tradicional desfile de poder militar en el paseo Los Próceres, en el suroeste de Caracas, con una exhibición del Ejército, la Marina, la Aviación y la Guardia Nacional (policía militarizada), que ha tenido el mayor peso en la represión a las protestas contra el Gobierno.
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