Josefina Vázquez Mota dijo que el “México de la muerte” y del “autoritarismo” no debe regresar.
La candidata presidencial del PAN pidió un minuto de silencio en memoria de Edgardo Hernández Corzo, simpatizante del PAN asesinado en Chiapas supuestamente por un candidato priista.
La panista envió su pésame a la familia de la víctima, y recalcó que el joven fue asesinado por sus “rivales políticos”. Destacó que Hernández Corzo luchó por la libertad y por el “México que está por venir”.
“Éste es el México que no va a regresar, este México de la muerte, este México del autoritarismo; este México que no soporta la libertad de expresión. Hoy un hombre de los nuestros perdió la vida, no el día de hoy, eso sucedió ya desde el día de ayer (lunes)”, manifestó en su último mitin en esta ciudad, tras lo cual todos los asistentes guardaron silencio.
Para esto, Vázquez Mota se ayudó de una tarjeta donde llevaba anotado el nombre del fallecido. Sin embargo, el nombre era equivocado, pues llamó “Édgar” a la víctima, en lugar de Edgardo.
Más tarde, el equipo de comunicación de la candidata envió un comunicado en el que mencionaba que a Edgardo sus allegados le decían “Édgar” de cariño.
“La abanderada panista pidió un minuto de silencio en honor a quien en vida la gente más cercana llamaba ‘Édgar’, Edgardo Hernández Corzo, chiapaneco asesinado por rivales políticos del PRI”, señala el boletín.
“LA ELECCIÓN NO ESTÁ RESUELTA”
Vázquez Mota insitió en que la elección aún no está resuelta, y dijo que será la encuesta del 1 de julio la que hablará sobre las verdaderas preferencias de los electores.
“La elección no está resuelta. Que no nos quieran desanimar, que no nos quieran decir que ya hay quien va a ganar, porque nosotros ya sabemos quién va a ganar, porque nosotros ya sabemos, ganaremos, eso es lo que pasará este 1 de julio”, confió en el mitin realizado en el lienzo Villa Charra ante 10,000 asisitentes, según cifras del equipo de campaña.
El presidente Felipe Calderón había coincidido en decir, horas antes, que la elección no estaba resuelta, que cada voto contaba el 1 de julio; palabras que la aspirante ha repetido durante semanas.
La abanderada de Acción Nacional aprovechó para insistir en que ninguna de las otras dos opciones de país es viable. Reiteró que ella representa la única manera de que México continúe teniendo estabilidad, pues mientras el priista Enrique Peña Nieto está vinculado a personajes como Tomás Yarrington o Humberto Moreira, el perredista Andrés Manuel López Obrador es una “opción de caos, intolerancia y deuda”.
“EL QUE NO BRINQUE ES PEÑA”… Y JOSEFINA BRINCÓ
Josefina se fue poniendo de mejor humor. Los jóvenes con máscaras de su cara coreaban “presidenta, presidenta”, desde la tribuna. Pero quizá el momento culminante llegó cuando un grupo de muchachos que estaba al pie del escenario donde ella hablaba comenzó a gritar la porra contra el candidato priista.
“El que no brinque es Peña, el que no brinque es Peña”, expresaban igual que ha ocurrido en las marchas anti-Peña. Josefina suspendió su discurso y, con una gran sonrisa, comenzó a brincar al ritmo de la porra.
Afuera, jóvenes panistas pintaban cruces en las manos de los asistentes: la señal con que Josefina pidió que se mostrara la simpatía hacia ella.
Por más de dos horas, sus simpatizantes habían estado ensayando porras a favor de la panista, en medio de un calor de 35 grados centígrados.
“Si una mujer gana la Presidencia, ganamos todas; yo no gané sola el debate, lo ganamos todas”, decía en su mitin.
“Ganó la más chingona!”, le respondían unas señoras desde las gradas del lugar.
Ante este recibimiento, Josefina se despidió pidiendo animo a sus seguidores y solicitándoles el voto para la opción que ella representa.
ADN Político
