Para los representantes de las diferentes organizaciones sociales del estado de Oaxaca, Ulises Ruiz Ortiz, es el principal responsable de la crisis que se vive en el sector salud.
Debido a los actos de corrupción que se cometieron durante su administración, decenas de comunidades indígenas no cuentan con infraestructura hospitalaria para hacer frente al Covid-19 y ahora los pacientes se ven obligados a trasladarse hasta la ciudad de Oaxaca.
El ex gobernador es acusado de desviar miles de millones de pesos que se habían destinado para la construcción y equipamiento de más de 100 centros hospitalarios, incluso fue denunciando por la desaparición de equipos para atender a pacientes con cáncer en los hospitales públicos.
Flavio Sosa Villavicencio denunció que Ulises Ruiz dejó 102 obras hospitalarias inconclusas, entre ellas dos hospitales de 60 camas en Matías Romero y Tlaxiaco, así como 6 hospitales de 30 camas.
Destacó que de los 6 hospitales de 30 camas algunos fueron en Huatulco, Tehuantepec y Chalcatongo. “También dejó inconclusos 50 centros de salud y Centros de Salud con Servicios Ampliados (CESSA)”.
El líder social evidenció a Ulises Ruiz Ortiz que este fraude y saqueo al erario del estado de Oaxaca, permitió que el ex gobernador construyera un hospital privado en la Ciudad de México (SEDNA), además lo acusó de actos de tortura y de la desaparición de Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, esto durante los hechos violentos suscitados en el conflicto social magisterial que estalló en 2006.
“Es importante en pandemia destacar que fue el carnicero de Ulises Ruiz Ortiz quien quebró el sistema estatal de salud de Oaxaca y saqueó las arcas estatales. El carnicero con más de veinte muertos en su conciencia, centenares de torturados, dos desaparecidos y que se enriqueció con el herario, sigue escupiendo veneno. El juicio en La Haya contra Ulises Ruiz está latente”, apuntó Sosa Villavicencio.