Las ciudades representan el 1.2% de la superficie de la tierra y 50% de la población habita en ellas, por lo que el 75% del consumo de energía y emisiones de carbono se producen en las ciudades, expresó Gino Van Begin, secretario general de ICLEI- Gobierno Locales por la Sustentabilidad.
Lo anterior, durante la primera conferencia magistral Las ciudades impulsoras de la sustentabilidad que ofreció en el XI Congreso Nacional ICLEI-Gobiernos Locales por la Sustentabilidad. Ciudades Resilientes y Sustentables que se llevará a cabo en la ciudad de Oaxaca del 28 al 30 de agosto.
Ante expertos nacionales e internacionales, funcionarios públicos, empresarios y académicos en desarrollo sustentable, Gino Van Begin resaltó la importancia de que los gobiernos nacionales y locales desarrollen acciones y políticas públicas enfocadas a la sustentabilidad para mitigar el cambio climático.
Expresó que de las 150 mil ciudades afiliadas al ICLEI, 12 de ellas, incluyendo el Distrito Federal, son megaciudades, 450 son superciudades y otras 450 son pequeñas y medianas ciudades.
“Las ciudades son el centro de la actividad económica, académica y cultural de un país y producen un tercio del Producto Interno Bruto; las megaciudades que pertenecen al ICLEI representan una gran proporción de las ciudades miembros de las Naciones Unidas, si una megaciudad como Seúl se plantea reducir las emisiones de dióxido de carbono en un 25% es como si varios países de Europa como Bélgica, Holanda, Lituania hicieran lo mismo”.
En este sentido, Gino Van Begin hizo un llamado a las autoridades para ser agentes de cambio a favor del medio ambiente. “Estamos consumiendo más de lo que el planeta puede producir, estamos viviendo a crédito y la deuda será para las siguientes generaciones”.
Por otra parte, Jason Spensley, coordinador de Cambio Climático, PNUMA-ORPALC, impartió la conferencia magistral Ciudades Resilientes y Sustentables en el Contexto del Cambio Climático.
Explicó que mitigar el cambio climático representa el reto más importante en la actualidad, ya que no es un tema que se pueda dejar bajo la responsabilidad de generaciones futuras.
“Latinoamérica y el Caribe es la región más urbanizada del mundo y su población se ha triplicado en los últimos 40 años; ese crecimiento se lleva a cabo en ciudades donde se estima que el 86% de la población en 2020 se urbanizará y provocará un aumento de demanda de infraestructura y recursos como agua y energía”.
Explicó que este fenómeno provocará altas emisiones de CO2 y arrastrará eventos frecuentes e intensos como cambios en régimen de precipitación y aumento de temperatura que no solo implica sequías sino limitaciones de agua e interrupciones de energía hidroeléctrica y afectaciones a la actividad agrícola, que a su vez repercutirá en la producción de comida, en el aumento de precios y en la desnutrición.
“Hay que aceptar que el cambio climático representa un problema, que ya no va a desaparecer, que continúa avanzando, pero que podemos mitigar sus efectos si cambiamos nuestro sistema de producción y consumo”, finalizó.