Por su gestión en favor de los que tienen menos, su productivo trabajo legislativo y el interés por escuchar a las personas del campo, en San Felipe Usila, el corazón de la Chinantla, y en San Felipe Jalapa de Díaz, tierra mazateca, hombres y mujeres perredistas unieron fuerzas para que Benjamín Robles Montoya sea el candidato a gobernador de Oaxaca.
Luego de recorrer los complicados caminos que conducen a la cuna del histórico “Caldo de Piedra”, Usila, una población custodiada por quince imponentes cerros y el río Grande que puede ser admirada desde el famoso mirador “Puerta del Cielo”, el precandidato sostuvo en el parque municipal un encuentro con sus compañeros y compañeras militantes y simpatizantes del PRD.
“Yo he dicho y hoy vuelvo a decir aquí en San Felipe Usila: ¡ya basta de tanta corrupción en Oaxaca!, porque cuando ellos roban ustedes pierden, por eso hoy les digo que es tiempo de unir Oaxaca, es tiempo de que sea tu voz la que se escuche y no la de los poderosos. Y hoy vengo aquí con mucho respeto, les vengo a pedir su respaldo para ser su candidato del PRD al gobierno de Oaxaca, candidato de una coalición donde estará el PAN y el Partido del Trabajo, y yo me voy a partir el alma para que Oaxaca salga adelante, llegó la hora del Pueblo”, aseveró.
En el quiosco de Usila, acompañado de la diputada federal Karina Barón Ortiz y líderes perredistas de la zona, Robles Montoya sostuvo que tiene los pantalones bien puestos para garantizar el cambio verdadero pese a remar contra corriente, en clara alusión a los obstáculos a los que se está enfrentando para ganarle la candidatura a quienes quieren seguir aferrados al poder.
Por ello, Benjamín Robles, para los militantes chinantecos del PRD, es la única persona en quien puede confiar el Sol Azteca para que este asegure su permanencia en la vida política estatal, además de ser la mejor propuesta, toda vez que argumentaron es el candidato del Pueblo.
Así se lo expresó en su lengua madre, chinanteco, Eloy Miguel López, uno de los simpatizantes del proyecto social “Unir Oaxaca” ante el perredismo de Arroyo Iguana, Arroyo Tambor, Cerro Caracol, Ampliación Aeropuerto, Colonia Ampliación Aeropuerto, Colonia Miguel Usila, Congregación Santa Flora, Paso Escaleras, Peña Blanca, Piedra Azúcar, Santa Flora y Santiago, a quienes pidió mantenerse unidos para salir adelante y para frenar a esos malos gobernantes.
Y directo, como acostumbra, Robles Montoya demostró que Oaxaca necesita un gobernador distinto, y les enfatizó: soy educado para cumplir lo que ofrezco y lo que prometo, no hay nadie que pueda andarme acusando de que yo he hecho promesas y no cumplo, me enseñaron a partirme el alma, y yo me voy a partir el alma porque Oaxaca salga adelante.
Este discurso, tocó las fibras más sensibles de los usileños y de la etnia mazateca de Jalapa de Díaz; en este último donde tras escucharlo, las mujeres ataviadas con sus coloridos huipiles clamaron el nombre de Benjamín Robles para gobernador que cimbró toda la Sierra Mazateca, demostrando la fortaleza del precandidato, conseguida con esfuerzos de años y no de un día para otro.
