Una posible crisis más: Héctor Rossete

Print Friendly, PDF & Email

Nos encontramos en la etapa 3 de la pandemia que nos ataca actualmente en nuestro país, la del SARS-CoV-2 y justamente estaríamos hablando de otra crisis en el personal de salud.

Los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la OIT (Organización internacional del trabajo) los profesionales sanitarios sufren un elevado nivel de estrés y un alto riesgo de violencia en el trabajo. Casi un 25% de violencia en el trabajo corresponde al ámbito sanitario. En estos últimos días estamos escuchando acerca de:

Violencia sanitaria son los insultos y agresiones a la orden del día en el personal de salud. Se traducen en lesiones, amenazas, coacciones, maltrato, hurto, injurias o vejaciones. En las últimas semanas se han dado mucho los casos en México en medio de la tempestad y no es para menos, hay incertidumbre, nerviosismo y miedo, pero no es justificable, el mejor aliado que podemos tener en estos momentos, somos los profesionales de la salud (médicos, enfermeras, nutriólogos, odontólogos, psicólogos y fisiatras) y no es justo que mucha gente se comporte así, se da la batalla en el momento que tiene que ser, se da la cara como primer contacto y de la exposición ni hablamos.

A pesar de la contingencia sanitaria, hay protestas del personal sanitario, por agresiones a los mismos, y esto no es conveniente en estos momentos para la situación que estamos pasando, se podría hablar de deserción y renuncias (es entrar a una nueva crisis) porque nadie garantiza la protección, incluso muchos(as) están al pie del cañón para enfrentar la situación anteponiendo y arriesgando la vida propia y de los suyos; se habla de héroes y los únicos en la actualidad y como siempre han sido los profesionales de la salud, no es por colgarse el protagonismo porque si bien, nuestro trabajo siempre ha sido el de atender y salvar vidas aunque no implique un reconocimiento alguno, está por demás decirlo.

Nuestro gobierno tiene que entender, que los mejores aliados para enfrentar esta crisis es el personal salubre, por ello, tiene la obligación de salvaguardar la integridad física de las personas. No es de alegrarse este acontecimiento y tampoco está nada bien que perdamos aliados, no se puede caer en el abismo por no saber solucionar la situación, tiene que hacer algo al respecto, ya que no se les brinda la protección suficiente., en lugar de acercarlos, los aleja y estamos hablando de puro “amor al arte” que muchos lo hacen.

Está claro el llamado de la jefa Fabiana Zepeda, “paren la violencia, somos gente común como cualquier otra; somos seres humanos que también tenemos sentimientos, pero también somos profesionales responsables de nuestra labor.”

Primum non nocere – «lo primero es no hacer daño».

Frase siempre presente para los profesionales de la salud, antes que un equívoco de actitud personal (no hay perfeccionismo alguno).

La visión de los pacientes respecto de la imagen que tienen de los médicos ha cambiado gradualmente. Así, el respeto, consideración y confianza que se les profesaba a los segundos al acudir en busca de sus servicios profesionales, si bien, no han desaparecido del todo, solo se han transformado sustancialmente, es de suma importancia mantenerlos presentes en estos tiempos.

¡Tu amigo, tu médico!

@HectorRossete