A pesar de que el Gobierno de Bashar al Assad había acordado con el mediador de las Naciones Unidas y de la Liga Árabe, Lakhdar Brahimi, una tregua temporal que se extendería durante los cuatros días que duraba la Fiesta del Sacrificio, lo cierto es que los bombardeos sobre la población no cesaron.
Así lo notificaron fuentes de la oposición a medios de comunicación, que denunciaron que no se ha respetado el acuerdo y que no se ha conseguido frenar la violencia en Siria. Este lunes es el último día de “paz”, pero durante todo el fin de semana se registraron ataques.
La televisión siria informó, además, de un atentado en Damasco que dejó más de 10 muertos. Fue un “ataque terrorista con coche bomba cerca de una panadería, en la calle Raoda, en Jaramana”, precisó la cadena estatal. Entre las víctimas fatales, había niños y mujeres.
La red opositora Sham destacó que aviones militares del régimen, de tipo Mig, atacaron a primera hora de la mañana las ciudades de Arbin y Zamalka, en los alrededores de Damasco. El mismo grupo añade que las fuerzas gubernamentales lanzaron proyectiles Shilk en los suburbios de Hama.
El domingo pasado, tercer día de tregua, 116 personas murieron en bombardeos y choques entre las tropas oficialistas y los rebeldes, de acuerdo con el Observatorio Sirio de Derechos humanos. Los Comités de Coordinación Local situaron la cifra en 128 y la Comisión General de la Revolución Siria, en 120.
Desde el Comando General de las Fuerzas Armadas Sirias, se acusó a los “grupos terroristas” de la oposición de ser quienes realmente violaron la tregua en Homs, Hama y Damasco, según informaron mediante un comunicado de la agencia de noticias oficial SANA.
Estas informaciones no han podido ser verificadas de forma independiente, debido a las restricciones que sufren los periodistas en la zona para desarrollar su trabajo.
El régimen de Damasco y el Ejército de Liberación Sirio aceptaron el jueves de la semana pasada la tregua temporal de cuatro días, aunque pusieron distintas condiciones para cumplirla. El alto el fuego, propuesto por Brahimi, resultó un fracaso en su intento de frenar la escala violenta en el país.
“La situación es mala y está empeorando”, dijo Brahimi a la prensa este lunes al lamentar que no hubiera funcionado el acuerdo por la festividad del Aid al Adha, tras reunirse con el canciller ruso, Sergei Lavrov en Moscú.
EFE