No se trata de un hackeo de cuentas de Twitter ni de spam, solo ha sido cuestión de exceso de celo.
Twitter ha salido al paso de los mensajes enviados por la propia empresa a un número indefinido de sus 140 millones de abonados en los que le anuncia que su contraseña ha sido cambiada. El mensaje ha sembrado el despiste, cuando no la preocupación de los receptores, al no saber si se trata de correo basura o de un hackeo.
En el mensaje de Twitter en su blog reconoce que “por error” restableció las contraseñas de “un gran número” de sus más de 140 millones de usuarios activos, al realizar una inspección rutinaria de seguridad para identificar cuentas que podrían haber sufrido algún tipo de hackeo.
“En casos en los que creemos que una cuenta ha sido comprometida, restablecemos la contraseña y enviamos un correo electrónico a su propietario para anunciarle lo que ha ocurrido”, dijo Twitter en su blog. “En este caso, sin querer, hemos restablecido las contraseñas de un mayor número de cuentas, más allá de aquellas que creíamos que habían sufrido algún ataque”.
Carolyn Penner, portavoz de la red social, se negó a decir cuántas cuentas de Twitter se han visto afectadas por el error, pero afirmó que en ningún caso había habido una violación de la seguridad.
El País
