*La Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, y la del Trabajo, Luisa María Alcalde, no aceptaron la “Toma de Nota” del líder nacional del Sindicato de Trabajadores Petroleros, Carlos Antonio Romero Deschamps.
* A cinco meses del Grito de Independencia Petrolera del Movimiento de Regeneración Nacional Obrero Sindical (Morenos), en Salina Cruz, triunfaría la lucha de los oaxaqueños Óscar Solórzano Méndez y Luis Zárate Cuevas.
El poder es meramente circunstancial. El poder hace creer a los pendejos que son inteligentes y a éstos últimos les enloquece. Igual que la corrupción, el poder absoluto corrompe absolutamente.
En México el máximo poder metaconstitucional solo dura seis años. A menos que se dé un golpe de Estado técnico a nivel legislativo desde el Congreso de la Unión para reformar la Constitución.
Intentos por reelegirse y mantenerse en el poder ha habido varios en México. Los ex presidentes Luis Echeverría Álvarez y Carlos Salinas de Gortari, lo intentaron fallidamente y generaron caos.
El populismo tercermundista de Echeverría, por consigna del imperialismo yanqui, inició la debacle del país. Y el gatopardismo solidarista de Salinas desató un baño de sangre aliado con el narco.
El riesgo para las gateantes democracias en América Latina son los gobiernos pseudo demócratas populistas. Su estrategia es la imposición de dictaduras constitucionales vía reformas legislativas.
Mientras se disipan o se hacen realidad los fundados temores nacionales es más que positiva noticia el principio del fin, ahora sí, de Carlos Romero Deschamps y su mafia, sin Toma de Nota.
Al igual que la mayoría de los presidentes de la República del PRI y del PAN, los “líderes charros” cobijados por el corporativismo sindical, también enloquecieron y se perpetuaron en el poder.
La Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero y la del Trabajo, Luisa María Alcalde, no aceptaron la “Toma de Nota” del líder nacional del Sindicato de Trabajadores Petroleros, Carlos Romero Deschamps, por lo que no tendría nombramiento oficial como representante sindical.
Lo anterior trascendió extraoficialmente el pasado sábado, según diversas publicaciones en las redes sociales, por lo que faltaría que en los próximos días oficialmente las titulares de las Secretarías de Gobernación y del Trabajo y Previsión Social confirmen la decisión.
Sin el reconocimiento oficial de Carlos Antonio Romero Deschamps, también serían desconocidos los 36 Secretarios Generales Seccionales del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana.
A cinco meses del Grito de Independencia Petrolera del Movimiento de Regeneración Nacional Obrero Sindical (Morenos), en Salina Cruz, triunfaría la lucha emprendida con gran visión y sensibilidad política de los oaxaqueños Óscar Solórzano Méndez y Luis Zárate Cuevas.
El Nuevo Paradigma Sindical de México, propuesto al Presidente Andrés Manuel López Obrador, es resultado de la exhaustiva investigación histórica y de derecho comparado a nivel global, realizado por el oaxaqueño y Doctor en Administración Pública, Luis Zárate Cuevas.
No ha sido una tarea fácil y sencilla, por el contrario, ha sido una lucha titánica contra los intereses multimillonarios de Carlos Antonio Romero Deschamps, propietario de pozos y plataformas petroleras, asociado con empresas multinacionales que saquean a México.
En los últimos 20 años, los dirigentes nacionales y seccionales del STPRM, se han visto involucrados en escándalos que van desde delincuencia organizada y lavado de dinero hasta desaparición de cientos de trabajadores disidentes en el país.
La escandalosa corrupción del enriquecimiento ilícito pasa por el “huachicoleo”, desvío de recursos, malversación de fondos, robo a los trabajadores petroleros, además de elecciones fraudulentas, agresiones, asesinatos y tentativa de homicidio, entre otros.
Los trabajadores disidentes afiliados al Sindicato Petroleros de México (PETROMEX), han pedido al Secretario de Hacienda y Crédito Público Carlos Manuel Urzúa Macías que investigue los bienes de Romero Deschamps, de sus hijos y de los 36 secretarios generales seccionales.
Durante la toma de posesión de los dirigentes de PETROMEX, encabezados por Pitágoras Cruz Salaya, en la Cámara de Diputados federal, Óscar Solórzano Méndez reiteró la denuncia de delincuencia organizada y delitos de lesa humanidad contra Carlos Romero Deschamps.
“¿Cómo es posible que este cínico personaje, después de ser un simple trabajador al que Carlos Salinas de Gortari impusiera como secretario general del STPRM, se dé una vida de jeque árabe con el dinero de los trabajadores petroleros…?”, se preguntan estos últimos.
El desconocimiento sindical de Romero Deschamps viene a sumarse al fulminante golpe de mano, que nadie esperaba, cuando en días pasados cuatro mil miembros de las fuerzas armadas de la Secretaría de la Defensa Nacional, tomaron 73 instalaciones estratégicas de Pemex, y seis refinerías.
Se tomaron por parte de las fuerzas armadas, 6 refinerías, 39 terminales de almacenamiento y despacho, entre las que se encuentra una marítima; 12 estaciones de rebombeo, y el Centro de Control México; es decir 15 sistemas de distribución.
De entrada y debido a esta intervención militar, ya se redujo de golpe y porrazo un 17.4% el robo de combustible y se espera que en los próximos días, semanas y meses, se siga reduciendo hasta que ya no ocurra.
Las fuerzas armadas quitaron al sindicato de Carlos Romero Deschamps el manejo de zonas “restringidas” y “estratégicas” como es, ni más ni menos, el centro de Monitoreo de Combustible al que ni altos funcionarios de Pemex podían pasar.
Al presentar en Palacio Nacional el Plan Conjunto del Gobierno de la República para Combatir el Robo de Hidrocarburos en Pemex, en su tradicional conferencia mañanera del pasado jueves, el presidente Andrés Manuel López Obrador denunció la existencia de una red interna en el gobierno y Pemex, responsable del 80% del “huachicoleo” y dio a conocer la toma de instalaciones.
Dijo el presidente López Obrador que solamente el 20% del “huachicoleo” o extracción clandestina de los ductos, provenía del crimen organizado y que esto era una “pantalla” para disfrazar el verdadero y enorme robo que provenía de las propias instalaciones de Pemex que era del 80%.
Según lo que dijo el presidente López Obrador, desde el Centro de Monitoreo había un robo diario de 200 millones de pesos que suman 73 mil millones de pesos anuales, que son, ni más ni menos, 31 mil millones de pesos más del presupuesto anual de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el 10% de la producción nacional.
Los pillos que manejaban el estratégico Centro de Monitoreo, de los cuales se detuvieron a tres funcionarios, que son pocos, considerando la magnitud del robo, se despachaban con la cuchara grande al robar el equivalente a 600 pipas diarias de 15 mil litros.
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