Un grupo de tres presuntos combatientes islámicos (yihadistas) buscados por la policía francesa por su actuación en Siria, se entregaron hoy en la sureña Gendarmería de Caylar, informaron sus abogados.
El abogado de uno de los detenidos explicó a medios locales que los tres presuntos yihadistas se rindieron porque saben que “los servicios de información quieren interrogarles y no quieren ser considerados en fuga”.
El grupo es sospechoso de pertenecer a una organización de reclutamiento de combatientes en Siria.
Este caso ha desatado un fuerte escándalo en Francia porque la víspera las autoridades franceses anunciaron que habían sido detenidos a su llegada al aeropuerto parisino de Orly.
Sin embargo, la noticia fue desmentida debido a que los yihadistas llegaron a Francia al aeropuerto de Marsella, sur, en donde no fueron controlados porque el sistema de control de pasaportes no funcionaba.
Los tres hombres, dos de ellos parientes del yihadista franco-argelino Mohammed Merah, autor de varios atentados en el sur de Francia abatido en 2012 por la policía en Toulouse, sur, pudieron entrar en Francia sin problemas y su paradero era desconocido por las autoridades.
La prensa francesa y numerosos políticos criticaron duramente hoy al ministerio del Interior por el suceso.
Los hechos se producen cuando Francia se encuentra en plena campaña de bombardeos contra bases del Estado Islámico en Irak y el ministerio del Interior incrementó la vigilancia sobre yihadistas ante la amenaza de atentados.
Agencias