La escasa oferta laboral de las empresas y la baja remuneración que ofrecen por las actividades a desarrollar, provocó que el número de personas que buscaron emplearse de manera independiente creciera más de 20 por ciento el año pasado, pese a que su actividad la tuvieran que realizar como ambulante.
En la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo al cuarto trimestre de 2011 se contabilizaron 13 millones de trabajadores independientes, cifra superior a los 10.8 millones registrados al concluir 2010, lo que significó que en el último año se agregaron a este sector 2.1 millones de personas.
Si bien una gran proporción de trabajadores independientes desarrollan sus labores en su propio domicilio, en puestos fijos, semifijos, también lo realizan en las instalaciones de las empresas que solicitan sus servicios; hay también un número importante que lo hace como ambulante, de casa en casa o en la calle.
Según cifras del INEGI, los trabajadores independientes que se emplean como ambulantes de casa en casa o en la calle sumaron 707 mil 979 personas al cierre de 2011, es decir, 26 por ciento más que lo registrado en 2010, es decir, 145 mil 747 personas más.
Otra gran porción de los trabajadores independientes lo hicieron en el campo, a cielo abierto, bordo, poza o mar; esta categoría sumó 2 millones 776 mil sujetos al cierre de 2011, es decir, 17 mil 272 más que los reportados un año antes.
Entre los trabajadores independientes que laboran en puestos improvisados al cierre de 2011, fueron registrados 463 mil 431 personas, 26.5 por ciento más que un año antes.
La encuesta mostró que un número importante de trabajadores independientes tiene como su principal punto de operación un automóvil, el dato de INEGI registró a 657 mil 225 personas bajo esa condición, es decir, 120 mil 800 más que los registrados en 2010.
Mortandad de changarros
Por separado, el INEGI informó que el descenso en el volumen de ventas, deudas, o la inseguridad pública orillaron a que 99 mil 904 personas abandonaran o cerraran su propio negocio durante 2011.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, sobre los eventos de abandono o pérdida de negocio propio, la disminución de ventas resultado por un exceso de competencia, fue lo que orilló a 42 mil 449 personas, es decir, 42.5 por ciento del total, a cerrar su establecimiento.
Estudios elaborados por cámaras empresariales muestran que la mayoría de los negocios que no prosperan, son establecimientos micro y pequeños, los cuales apenas llegan a tener un ciclo de vida de entre uno a tres años, entre otras razones por falta de capacidad para establecer una buena administración o reportar un exiguo respaldo financiero.
Cifras oficiales indican que las microempresas, es decir aquellas con uno y hasta 10 empleados, representan más de 90 por ciento de las unidades económicas del país y concentran casi la mitad del personal ocupado en México.
El segundo motivo que llevó a cerrar establecimientos, dijeron los encuestados por el INEGI, fue porque el negocio resultó menos rentable de lo esperado. En esa condición se encontraron 16 mil 546 personas,16.6 por ciento del total de las empresas que se cancelaron el año pasado.
Otro factor que provocó el abandono del negocio fueron las excesivas deudas que contabilizaron y que los llevó a declararse en quiebra. En esa situación el INEGI reportó 3 mil 749 casos.
Sin ser un factor menos importante, los problemas de inseguridad pública también fueron una razón para que los dueños de negocios decidieran bajar la cortina.
Sin detallar de qué tamaño fueron los negocios, el INEGI informó que el año pasado se contabilizaron mil 629 casos que responsabilizaron al problema de la inseguridad como la causa para dejar de operar.
La semana pasada, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) reveló que en los últimos cinco años cancelaron su operación 160 mil empresas derivado de los problemas de violencia e inseguridad en el país.
La Secretaría de Economía rechazó dicha estimación y argumentó que los números de la cámara empresarial carecen de sustento.
El INEGI tiene, además de los mil 629 negocios que cerraron el año pasado por ese motivo, otros 2 mil 62 que declararon haber concluido la operación del establecimiento, pero en 2010.
Las cifras del instituto sólo tienen los preliminares tanto de 2010 y 2011, por lo que en conjunto la inseguridad pública motivó que en ambos años se hayan cerrado casi 3 mil 700 negocios.
Otro aspecto que identificó el INEGI fue que los dueños de los negocios tuvieron problemas con las autoridades y derivado de ello ya no continuaron la operación de la empresa. En esa situación se contabilizaron 109 casos el año pasado.
Sobre el autoempleo en 2011
20% fue la tasa de crecimiento de las personas que decidieron laborar por cuenta propia, de acuerdo con cifras del INEGI.
Agencias
