“Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes” establece la Declaración de las Naciones Unidad en su artículo 5, sin embargo a pesar de que han pasado más de 20 años desde que entró en vigor la Convención de la Convención contra la Tortura esa práctica sigue siendo generalizada, así lo declaró el secretario general de la ONU.
La tortura es considerada por la Organización de las Naciones Unidas como un crimen de derecho internacional por lo que su práctica constituye una falta contra la humanidad, pues al ejercerlo se destruye la personalidad de la víctima despreciando la dignidad de todo ser humano.
Las Naciones Unidas han condenado desde sus comienzos, la práctica de la tortura como uno de los actos más aborrecibles que los seres humanos cometen contra sus semejantes, por lo que desde el 12 de diciembre de 1997, la Asamblea por recomendación del Consejo Económico y Social, proclamó el 26 de junio como Día Internacional de las Naciones Unidas en Apoyo de las Víctimas de la Tortura.
Para la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca la tortura es un acto que se puede prevenir mediante la educación y formación en Derechos Humanos por lo que exhorta a las autoridades competentes primero a generar una cultura de fomento al respeto de la cultura los Derechos Humanos a fin de que en ningún momento se violente la dignidad y se desvalorice a las personas.
Nuestro país desde 1986 ratificó la Convención contra la Tortura, por lo que en octubre de 2012 el Comité contra la Tortura de las Naciones Unidas con sede en Ginebra abrió su evaluación al estado mexicano y en sus conclusiones expresó su profunda preocupación por la práctica en la tortura en el país en particular ante el contexto del uso de las fuerzas armadas en áreas de seguridad pública.
En Oaxaca el 22 de julio de 2012 se presentaron actos de tortura que fueron presentados ante este organismo público, autónomo y ciudadanizado, los hechos ocurrieron después de una marcha en la que en integrantes del Movimiento “Yo soy 132” fueron agredidos y uno de ellos sometido a tortura, ante dichos actos este organismo con las facultades que le otorga la ley recomendó al Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez investigar y sancionar la tortura ejercida.
Para la DDHPO la mejor herramienta para prevenir acciones que vulneran Derechos Humanos es la educación, por lo que se pronuncia porque las autoridades pongan en marcha acciones que contribuyan a establecer un trato digno hacia las personas, además de resarcir los daños a las víctimas de tortura.