El incremento en las tasas de interés de largo plazo en Estados Unidos llevó al rendimiento del Bono M a 10 años de México a 8.15 por ciento en el mercado secundario de deuda.
El incremento en las tasas de interés de largo plazo en Estados Unidos llevó al rendimiento del Bono M a 10 años de México a 8.15 por ciento en el mercado secundario de deuda, un nivel no visto desde marzo de 2011, de acuerdo con información de Bloomberg.
Las presiones en el mercado secundario de deuda se reflejaron en un aumento en la tasa del Bono M a 10 años en la subasta primaria de valores gubernamentales, efectuada el martes, al reportarse en 8.17 por ciento, lo cual implicó un aumento de 34 puntos base con respecto a la subasta anterior.
La demanda fue moderada al superar en 1.81 veces a lo colocado, aunque por arriba del 1.56 reportada en la subasta anterior.
En términos de prima de riesgo, el diferencial de tasas entre México y Estados Unidos en el bono de 10 años se encuentra en 493 puntos base, todavía por debajo del nivel máximo de 513 alcanzado este año.
El imán que representa para los capitales los niveles alcanzados en las tasas de interés en naciones como Estados Unidos podría todavía derivar en un “premio” mayor para la compra de instrumentos de largo plazo en México.
Entre las implicaciones del alza en las tasas de largo plazo, se encuentra el mayor costo en que incurrirá el sector público para financiarse en el mercado nacional.
En el ciclo de alza en las tasas de largo plazo en Estados Unidos se observó el martes un respiro, a la espera del resultado de las subastas de bonos norteamericanos, a efectuarse en esta semana. Estas serán un buen termómetro que muestre el apetito por este tipo de instrumentos.
“La tasa de rendimiento de Estados Unidos se ubicó momentáneamente por encima del 3.25 o ciento, nivel no observado desde el 2011, aunque se corrigió a la baja para colocarse en 3.20, con una disminución de tres puntos base con respecto al cierre del viernes de la semana pasada, pues el día de ayer se mantuvieron cerradas las operaciones en el mercado de bonos estadounidense”, señaló Gabriela Siller, directora de análisis de Banco Base.
El alza en los rendimientos de los bonos norteamericanos de largo plazo obedece a las presiones inflacionarias provocadas por el fuerte desempeño de la demanda y por la aplicación de aranceles a las importaciones de algunos productos provenientes de los principales socios comerciales de Estados Unidos, particularmente de China.
El rendimiento del bono norteamericano referencial a 10 años se encuentra en 3.20 por ciento, cerca de su mayor nivel desde mayo de 2011.
En operaciones intradía, llegó a tocar la semana pasada un máximo en 3.26 por ciento.
Fuente: elfinanciero.com