Los rescatistas trabajaban este domingo con cuidado para sacar a más sobrevivientes de entre los restos de un alto edificio de viviendas que se derrumbó durante un potente y poco profundo terremoto en el sur de Taiwán. Al menos 26 personas murieron en el sismo y había más de 100 desaparecidos en el edificio.
El centro de emergencias en Tainan, la ciudad más afectada por el temblor, dijo este día que se había rescatado a más de 170 personas del edificio después del terremoto de magnitud 6.4 que sacudió la región el sábado al amanecer.
El alcalde de Tainan, Lai Ching-te, dijo en entrevistas televisivas desde el lugar del derrumbe del edificio que se estimaba que había al menos 124 personas atrapadas, muchas en la parte inferior de los escombros. Los equipos pudieron rescatar a mucha gente con información de los que salieron de los posibles lugares con sobrevivientes y de los que seguían en el interior, dijo Lai.
Huang Guang-wei, que residía en el octavo piso, fue rescatado el domingo por la mañana de una zona diferente del edificio, en un reflejo de la gran deformación en el edificio, dijo Lai. Los rescatistas sólo podían ver a Huang a través de una grieta de 10 centímetros (4 pulgadas) y tardaron ocho horas en sacarlo, señaló el alcalde.
También se rescató a Chiu Guo-hsiung, de 32 años, que pudo proporcionar los socorristas su nombre y otra información.
Entre las víctimas mortales había una niña de seis meses que fue sacada de entre los escombros y trasladada al hospital, donde se certificó su muerte. Unos 40 minutos después los rescatistas sacaron al que creían era su padre, pero ya estaba muerto, dijo Wang Dign-Yu, miembro del partido gobernante en Taiwán. La información colocada antes en un tablón en el lugar había indicado erróneamente que se había sacado a una mujer con el bebé.
Un sexagenario, cuyo hijo logró escapar y cuya nuera se encontraba grave en un hospital, intentaba ayudar a los socorristas a ubicar a sus nietos. “Mis nietos de 11 y 12 años continúan dentro en el noveno nivel”, señaló el hombre, que sólo facilitó su apellido, Huang. “Le dije a mi hijo que no comprase un apartamento aquí, era sospechosamente barato”.
Atrás de él, otro hombre movía la cabeza afirmativamente mientras esperaba noticias de sus parientes que se encontraban en el séptimo nivel.
El gobierno municipal dijo que 24 de las 26 muertes confirmadas se debían al colapso del edificio. Del derrumbe se había rescatado a 171 personas, de las que 91 se enviaron al hospital. En el resto de la ciudad se rescató a más de 100 personas, de las que ocho recibieron tratamiento en hospitales.
La espectacular caída del edificio de 17 niveles suscitó de inmediato dudas sobre su construcción y el ministro del interior de Taiwán dijo que habría una investigación.
Otros nueve inmuebles se vinieron abajo y cinco quedaron inclinados, señaló el gobierno de la ciudad.
Este domingo, miles de socorristas vestidos con uniformes rojos, naranjas, amarillos y negros, trabajaban en diferentes niveles del edificio que estaba plegado y que era sostenido con pilares de acero.
El socorrista Su Yu-min dijo que intentaban avanzar abriéndose paso entre paredes y pilares en su intento por alcanzar a las personas atrapadas en la parte inferior de los escombros.
“Son necesarias algunas horas para completar la búsqueda de una sola familia y a veces dos horas sólo para avanzar 30 centímetros (12 pulgadas)” cuando un muro bloquea el paso, agregó.
El temblor ocurrió dos días antes del inicio de las celebraciones del Año Nuevo Lunar, que es la fiesta familiar más importante en el calendario chino.
Los operadores del tren de alta velocidad de Taiwán anunciaron el domingo que el servicio se reanudaría por completo a partir del mediodía.
El derrumbe del edificio de viviendas provocó dudas sobre la calidad de construcción de la estructura, que databa de 1989.
El gobierno de Tainan indicó que el inmueble no estaba catalogado como una estructura peligrosa antes del sismo y el ministro del interior, Chen Wi-zen, señaló que se investigará si la compañía constructora había ahorrado costes de forma excesiva.
Los temblores afectan con frecuencia a Taiwán, pero la mayoría son menores y causan poco o ningún daño. Sin embargo, dos mil 300 personas perdieron la vida en el terremoto de magnitud de 7,6 que azotó en 1999 el centro de Taiwán.
Agencias