El tercer día de búsqueda de supervivientes del deslave que sepultó el jueves la aldea guatemalteca El Cambray II, en las inmediaciones de la capital, estuvo marcado por el duelo y la esperanza.
Esta noche, a las 22:30 horas locales, se vence el plazo de 72 horas posteriores al momento del desastre y que según estándares internacionales concluyen con la esperanza de encontrar a víctimas con vida.
Hasta esta tarde, los cuerpos de rescate de Guatemala recuperaron los cadáveres de 122 personas, mientras cerca de 300 permanecían desaparecidas.
De los muertos, 38 fueron identificados 26 adultos y 12 menores) y 52 faltaban de ser reconocidos (33 adultos y 19 menores de edad).
Las titánicas labores de rescate comenzaron a las 6:00 horas locales, con el objetivo de llegar a cerca de 125 viviendas sepultas bajo 60 metros de tierra, de acuerdo con el diario local Prensa Libre.
Los voluntarios y rescatistas, que durante los primeros dos días de labores se valieron de palas para remover el lodo, fueron reemplazados por maquinaria pesada por razones de seguridad.
A la zona de desastre se trasladaron unas 13 excavadoras, 10 retroexcavadoras, 3 cargadores frontales, seis minicargadores y un tractor.
Julio Sánchez, vocero de los equipos de rescate, informó en conferencia de prensa durante la tarde que se habían removido 74 mil toneladas de material, unos 40 metros de tierra y escombros.
Mientras, los cementerios estaban colmados de escenas de dolor, con familiares dando sepultura a sus seres queridos y en algunos casos llorando la desaparición de otros, de quienes sólo queda la esperanza de encontrarlos con vida.
Otro de los grandes retos del día fue la de evacuar a personas en lo alto de la corona del cerro que se resistían a salir de la zona de riesgo.
Alejandro Maldonado, secretario de Conred, dijo en la conferencia de prensa que se buscó la intervención de la Procuraduría de Derechos Humanos para que dialogue con las familias y que estas comprendan el riesgo que corren.
Agregó que la declaratoria de un estado de emergencia podría permitir el desalojo por la fuerza, por lo que quedan a la espera que los afectados lo hagan por sí mismos.
Pese a los avances del día, la posibilidad de lluvias durante la noche obligaron a paralizar las labores de búsqueda durante una media hora, debido a la inestabilidad del terreno y la probabilidad de que se produjera un nuevo alud, aunque la probabilidad de que el alto se repita es alto.
El instituto de meteorología nacional mantiene una vigilancia permanente en el sector afectado y prevé que las lluvias cesen de manera momentánea el próximo 9 de octubre, para terminar definitivamente la segunda o tercera semana del mes.
Autoridades reconocieron que la época de lluvias de este 2015, que va de mayo a octubre aproximadamente, fue deficitaria, pero que asentamientos como El Cambray II son más vulnerables a estas situaciones debido a las condiciones de extrema pobreza y a que están ubicados en laderas de pequeñas colinas.
De acuerdo con la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), solo en el área metropolitana hay 232 asentamientos considerados de riesgo, al estar ubicados en laderas o barrancos, y se calcula que en ellos viven unas 300 mil personas.
El Presidente de Guatemala, Alejandro Maldonado Aguirre, agradeció al Mandatario mexicano, Enrique Peña Nieto, por el apoyo brindado tras el derrumbe ocurrido en la nación centroamericana.
A través de Twitter, el Gobierno de Guatemala informó que el agradecimiento se llevó a cabo vía telefónica.
El Gobierno de México envió el sábado un equipo de apoyo integrado por efectivos del Ejército, la Marina, policías federales y funcionarios de Protección Civil, que llevaban 16 perros para colaborar en las tareas de recuperación de cuerpos.
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