Al inaugurar la planta donde a partir de 2012 se producirán 30 millones de antígenos al año para la vacuna contra la influenza y hasta 90 millones para situaciones de emergencia, el presidente Felipe Calderón aseguró que México está “más preparado que nunca para lidiar con una pandemia” y producir sus propias vacunas.
Luego de supervisar la Feria de Salud de Prevención del ISSSTE en Ixtlahuaca, Estado de México, el presidente Calderón advirtió que si en México “no le entramos en serio a la prevención de salud, no vamos a poder enfrentar a largo plazo el gravísimo problema de salud que se nos viene”.
Dijo que “la obesidad ya se convirtió en un tema de vida o muerte” y llamó a adoptar mejores hábitos, como alimentarse sanamente y ejercitarse incluso bailando “una buena cumbia” media hora al día.
Antes, el presidente Calderón recorrió las instalaciones de la planta de Sanofi-Pasteur en Ocoyoacac, donde se le explicó el proceso de creación de los antígenos en claras de huevo, para que posteriormente BIRMEX, perteneciente al gobierno federal, se encargue de la producción nacional de las vacunas.
Ahí el director general del laboratorio francés, Wayne Pisano, detalló que la influenza afecta a 600 millones de personas al año, de las cuales fallecen casi 500 mil. Dijo que cuentan con plantas como las de Ocoyoacac —en la que se invirtieron mil 725 millones de pesos— en Francia, Estados Unidos y China.
Mientras que el mandatario federal dijo que “aunque a toro pasado se ve que las cosas ya no están tan graves, no hay que olvidar que más de mil mexicanos, que nosotros sepamos, más de mil mexicanos murieron el año pasado por la influenza; se dice fácil, pero no es así”, expresó.
Milenio