El índice nacional de precios al consumidor se incrementó 0.32 por ciento en la primera quincena de enero de 2012, dato superior al 0.17 por ciento que registró en igual periodo del año anterior, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
De esa forma, la inflación general alcanzó un nivel de 3.94 por ciento, es decir, cerca del límite del objetivo de Banco de México, que es de 3 por ciento, con una variación de +/- 1 por ciento.
El resultado de la inflación estuvo ligeramente por encima de la expectativa del consenso de analistas que previeron un resultado de 3.87 por ciento para esta variable.
Durante los primeros 15 días del año, los productos con mayores precios al alza y mayor incidencia sobre la inflación fueron tortilla de maíz, automóviles, tomate verde, pollo, loncherías, fondas, torterías y taquerías, carne de cerdo, electricidad, pan dulce, huevo y gas doméstico LP.
Por el contrario, los bienes y servicios que registraron una baja en sus importes fueron servicios turísticos en paquete, transporte aéreo, servicio telefónico local fijo, ropa de abrigo, papaya, uva, limón, papa y otros tubérculos, cebolla y gas doméstico natural.
La variación del índice de precios subyacente fue de 0.20 por ciento en el periodo de referencia, con lo que la inflación de este componente (considerado mejor parámetro de medición de este indicador porque se eliminan factores estacionales) quedó en 3.32 por ciento.
El índice de precios de la canasta básica, que considera más de 80 genéricos de consumo fundamental en las familias mexicanas, registró un incremento de 0.49 por ciento en la primera quincena de enero de 2012, cifra superior al 0.47 por ciento de igual lapso de un año atrás.
El analista económico de Santander, Rafael Camarena, dijo que el resultado “podría incomodar” al Banco de México en cuanto a relajar su postura monetaria, aunque en su último comunicado de política monetaria dejó abierta esa posibilidad ante los riesgos sobre el crecimiento económico y un ambiente de políticas monetarias laxas de los principales institutos centrales del mundo.
Samuel Moreno, experto de Invex explicó que la inflación de la primera quincena del año fue resultado de una presión mayor por el lado de los precios de los productos agropecuarios, ocasionado por las condiciones de sequía que se registran en el país.
Aseguró que no hay evidencia de presiones cambiarias en los precios de la economía mexicana; sin embargo, persisten riesgos como un eventual deterioro de los mercados financieros provoque una astringencia del crédito, o condiciones climáticas adversas en la segunda mitad de 2012.
Agencias
