Los ministros de la iglesia católica de Oaxaca no sirven a Dios sino que están al servicio del gobierno de Gabino Cué, asestó la bancada del PRI al abandonar la sesión solemne conmemorativa del Día Internacional de los Derechos Humanos.
Antes de que el activista político y sacerdote Wilfrido Mayrén Peláez hiciera uso de la Tribuna más alta de la Entidad, el diputado local del PRI, Elías Cortés avisó a la presidenta del Congreso, la panista Eufrosina Cruz Mendoza que su fracción había decidido abandonar la sesión ante la falta de respeto generada por los activistas defensores de Derechos Humanos.
Al inicio de la sesión intervinieron los diputados Pavel López Gómez, del PRD y Martín Vásquez Villanueva, del PRI, quien convocó a la firma de un acuerdo político para la reconciliación, pero de manera simultánea los activistas exhibieron mantas con la exigencia de cárcel al ex gobernador Ulises Ruiz Ortiz por la violación a los derechos humanos durante el conflicto de 2006.
En consecuencia, los diputados priistas abandonaron la sesión y exasperados se dirigieron a sus cubículos del edifico de la Cámara.
En entrevista, el priista Marco Antonio Cuevas condenó la actitud de los activistas defensores de derechos humanos y “se le fue a la yugular” del representante legal de la Arquidiócesis de Antequera, Wilfrido Mayrén Peláez.
Señaló contundente que los sacerdotes liberales encabezados por el llamado “Padre Uvi” no están al servicio de Dios sino del gobernador Gabino Cué Monteagudo y exigió “que se dediquen al catecismo no a hacer política facciosa”.