* “Si quieres derrotar la corrupción debes estar listo para enviar a la cárcel a tus amigos y familiares”, decía Lee Kuan Yew, considerado el padre de Singapur, quien abatió la corrupción.
* Asimismo, el gobierno de Singapur apoyó a medios de comunicación independientes y objetivos, que pudiesen investigar y denunciar imparcialmente todos los casos de corrupción en ese país.
La productiva reunión sostenida por el Gobernador Alejandro Murat, con el Primer Ministro de Singapur, Lee Hsien Loong, confirma la visión global desde lo local del mandatario oaxaqueño.
Junto al canciller Marcelo Ebrard, gobernadores del sur-sureste y Rafael Marín Mollinedo, titular del Corredor Interoceánico, buscan fortalecer los proyectos e inversiones en México y Oaxaca.
Singapur está interesado en el desarrollo del Istmo de Tehuantepec que convertirá al sur-sureste en una región clave para el comercio global en coordinación con el Gobierno Federal, Oaxaca y Veracruz.
Sin embargo, mucho tienen que aprender de Singapur los gobiernos de Andrés Manuel López Obrador y de Alejandro Murat, para convertir a México y a Oaxaca en una potencia media a nivel global.
En Singapur la ley no se negocia ni cede a presiones. Defienden la pena de muerte como medida estricta para acabar con la delincuencia. Los asesinos y narcotraficantes terminan en la horca.
Otros crímenes graves como violaciones y secuestros se castigan con largos periodos en la cárcel y azotes. Asaltos y distintos grados de vandalismo se sancionan con azotes y condenas más cortas.
En la actualidad nadie duda que la clave del éxito de Singapur se debe a que empezó combatiendo la corrupción con estrictas sanciones, con base en un Estado de Derecho fuerte, sólido y enérgico.
“Si quieres derrotar la corrupción debes estar listo para enviar a la cárcel a tus amigos y familiares”, decía Lee Kuan Yew, considerado el padre de Singapur, quien abatió la corrupción.
Asimismo, el gobierno de Singapur promocionó a medios de comunicación independientes y objetivos, que pudiesen investigar y denunciar imparcialmente todos los casos de corrupción.
Murat tiene claro su proyecto de gobierno por su formación académica en Derecho corporativo, fiscal, financiero y de propiedad, Relaciones Internacionales, Banca y Finanzas Internacionales.
El mayor problema que enfrenta al iniciar el declive de su administración, es el valemadrismo de sus amigos y colaboradores más cercanos yupis y yopes. Le sabotean enemigos y traidores.
No entienden su visión global desde lo local. Cuesta trabajo entender la trascendencia de la frase “Más Oaxaca en el mundo y más mundo en Oaxaca”, no es simple retórica ni menos demagogia.
Es la visión que le da haber hecho dos maestrías en la Universidad de Columbia, Nueva York. Y colaborar con Joseph Stiglitz, Premio Nobel de Economía y tener encuentros con Paul Krugman.
El gobernador Alejandro Murat es un convencido de la trascendencia estratégica geopolítica de evitar la confrontación Estados Unidos-China y opta por apoyarse como opción en Singapur.
Es una especie de tercera vía económico-financiera entre el capitalismo de Estados Unidos y el comunismo de China, Singapur es un país con rasgos tanto democráticos como autoritarios.
En Singapur, uno de los «cuatro tigres asiáticos», las libertades civiles y de expresión están sumamente restringidas y se dan casos de censura por parte del Gobierno republicano de corte parlamentario.
Es una de las principales ciudades globales y uno de los centros neurálgicos del comercio mundial, contando con el tercer mayor centro financiero y el segundo puerto que más mercancías mueve.
Es el tercer país con mayor renta per cápita del mundo y figura entre los primeros países en las listas internacionales de educación, salud, transparencia política y competitividad económica.
El promotor de esta iniciativa apoyada en una profunda reforma educativa, fue Lee Kuan Yew, considerado el padre de Singapur, que ocupó el cargo de primer ministro desde 1959 hasta 1990.
El principal objetivo de su Reforma Educativa es lograr que los estudiantes piensen, analicen y resuelvan problemas por sí mismos, y que no se limiten a los libros de texto, sino que vean más allá.
Ejerció un gobierno estricto en lo social, profundamente capitalista que, con la corrupción abatida, impulsó su economía hasta convertirla en uno de los países más competitivos del mundo.
Al independizarse definitivamente de Malasia en 1965 la mayor parte de su población de Singapur era pobre, debido a que la malversación y el soborno eran parte integral de la vida pública.
Una de las medidas más importantes adoptadas en Singapur para luchar eficazmente contra la corrupción fue la de aumentar los salarios de los funcionarios para que no se corrompieran.
El Ministerio de Finanzas creó un programa especial de lucha contra la corrupción, que incluía rotar a los funcionarios para evitar complicidades o llevar a cabo inspecciones sin previo aviso.
La Oficina de Investigación de Corrupción tiene poderes autoritarios. Sin una orden judicial puede detener a los sospechosos de corrupción e investigar y congelar sus cuentas bancarias.
Todo funcionario condenado por corrupción es privado de su empleo, de su pensión y de todos los beneficios. Han sido enviados a prisión ministros federales, líderes comunitarios, líderes de sindicatos y altos directivos de empresas públicas.
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