Miles de familias permanecen sin el suministro de agua, electricidad y gas en Nuevo León, una semana después del impacto de las torrenciales lluvias causadas por el huracán ‘Alex’.
Además, unas 106 comunidades y ocho cabeceras municipales continúan incomunicadas ante el desbordamiento de ríos y presas que colapsaron por completo las vialidades hacia esas poblaciones.
Igualmente, las carreteras libre y de cuota hacia Nuevo Laredo siguen cerradas a la circulación, luego de quedar inundadas en varios tramos, al desbordarse el río Salado.
También unas 22 mil familias del municipio de Anáhuac no han regresado a sus viviendas, debido a que se encuentran bajo el agua, después de la apertura de las compuertas de la presa Venustiano Carranza, en Coahuila.
Rescatistas de Protección Civil del estado, con apoyo del Ejército Mexicano, trabajan incansablemente para llevar auxilio, alimentos y medicinas a miles de familias damnificadas en todo el estado.
EL UNIVERSAL
