Sicario de CATEM en asesinato de exlíder de la CANACINTRA: Alfredo Martínez de Aguilar

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* Reportes de inteligencia sobre el negro historial del expediente delictivo de “El Centavo” revelan la protección política, policíaca, en la Fiscalía General del Estado y el Tribunal Superior de Justicia.

* Confiamos en la palabra empeñada por el Gobernador Alejandro Murat para apoyarnos a resolver la invasión de nuestro predio en el paraje del arroyo El Coquito antes que concluya su gobierno.

En la vida, y más en política y en la delincuencia común, organizada o en los propios carteles del narcotráfico, no hay perro si dueño ni caballo jinete. No hay casualidades, sino causalidades.

El libro bíblico del Eclesiastés sentencia 1, 10: Nihil novum sub sole. No hay cosa nueva debajo del sol. Sostiene que lo que parece novedoso puede no serlo, ya que todo tiene su precedente.

La criminología afirma, como axioma, con toda razón, que no existe el crimen perfecto, sino la investigación imperfecta. Agregaríamos que ello ocurre por complicidad derivada de la corrupción.

La detención de Miguel Giovanni García “El Centavo”, por el secuestro y asesinato del exlíder de la CANACINTRA en Oaxaca, da un giro radical en las investigaciones hacia el crimen organizado.

El trabajo sucio de sicario, público y privado, que “El Centavo” ha realizado durante varios años como, deja entrever que Adalberto Castillo González bien pudo ser ejecutado por “encargo”.

La pregunta obligada es, de quién es la mano negra que ordenó su ejecución y, sobre todo, resulta doblemente importante saber por qué, es decir, el móvil que orilló a tomar tal decisión letal.

El exlíder de la CANACINTRA en Oaxaca estaba estrechamente vinculado al controvertido ex gobernador Ulises Ruiz Ortiz, quien se ha destapado a la candidatura presidencial independiente.

Al lado de Pepe Escobar, propietario de la cadena Ópticas América, que creció nacionalmente con el apoyo de Ulises, Adalberto organizó durante el conflicto de 2006 la marcha a favor de Ulises.

Adalberto Castillo era hermano de Jorge Enrique Castillo Díaz, quien junto con Ángel Benjamín Robles Montoya, dueño del PT, actuara como vicegobernador durante el gobierno de Gabino Cué.

Además, dos hermanos del malogrado, exlíder de la CANACINTRA en Oaxaca, monopolizan la operación del “giro negro” de diversos moteles en municipios de la zona metropolitana.

Reportes de inteligencia sobre el negro historial del expediente delictivo de “El Centavo” revelan la protección política, policíaca, en la Fiscalía General del Estado y en el Tribunal Superior de Justicia.

Esas redes de complicidad, resultantes de la escandalosa corrupción de las áreas de seguridad, procuración e impartición de justicia, explican la impunidad que ha gozado él y otros sicarios.

Redes de complicidad y corrupción con las autoridades municipales de los Valles Centrales, particularmente de Xoxo, donde invaden terrenos, entre otros, un predio de mi propiedad.

Confiamos en la palabra empeñada por el Gobernador Alejandro Murat para apoyarnos a resolver la invasión de nuestro predio en el paraje del arroyo El Coquito antes que concluya su gobierno.

Al mismo tiempo, resulta mucho más grave que, a pesar de contar con órdenes de aprehensión pendientes de ejecución, estas no hayan sido realizadas, amén de carpetas de investigación.

“El Centavo”, ha sido escolta de Juan Ángel Bartolano, alias “Juampers”, ex incondicional del expresidente municipal de Xoxocotlán Alejandro López Jarquín, perredista, ahora morenista.

Juan Ángel Bartolano es el principal cabecilla de los invasores de tierras en Xoxocotlán con el apoyo de Eric Filiberto Jiménez Robles “El Chivo”, sicario del Sindicato Libertad y, ahora, de CATEM Joven.

“El Centavo” es sicario de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM Joven) ex Sindicato Libertad, que lideran Iván Tomás y Juan Yahveh Luis Villaseca.

“El Centavo”, también ha operado como sicario mercenario al servicio de la organización radical Unión de Artesanos y Comerciantes Oaxaqueños en Lucha (UACOL), aliada con el FPR y Sol Rojo.

La ejecución del exlíder de CANACINTRA, por tanto, debe ser atraída por la FGR por la detención del “El Centavo”, asesino del crimen organizado, agresor de periodistas e invasor de tierras en Xoxo.

La detención, una vez más, de Miguel Giovanni García “El Centavo” es clave para combatir y desarticular al crimen organizado que opera en y desde el municipio conurbado de Xoxocotlán.

Desde finales de los 60, en las agencias municipales y colonias, sobre todo, las creadas por invasión de tierras en Xoxocotlán han existido casas de seguridad de la guerrilla y del crimen organizado.

Algunos conocidos empresarios secuestrados han estado resguardados en las casas de seguridad que bandas de secuestradores y narcomenudistas tienen en jurisdicción de Santa Cruz Xoxocotlán.

La razón de la existencia de dichas casas de seguridad es simple y sencilla: la ubicación geográfica estratégica del municipio conurbado de Xoxocotlán hacia los Loxicha y Tlaxiaco, bastiones del EPR.

La ejecución del exlíder de CANACINTRA por el sicario “El Centavo”, es asunto de seguridad nacional por sus nexos con el crimen organizado. FGR, Ejército y Guardia Nacional deben ahondar la investigación.

alfredo_daguilar@hotmail.com

director@revista-mujeres.com

@efektoaguila