El secuestro y extorsión de migrantes ha dejado a la delincuencia organizada ganancias por 25 millones de dólares tan solo en los últimos seis meses, reconoció Alejandro Solalinde, coordinador Pastoral de la Movilidad Humana de la Diócesis de Oaxaca.
El párroco, quien fue el primero en denunciar el plagio masivo de 50 indocumentados en la cercanía del poblado de Santa María Chahuites en la región del Istmo de Tehuantepec, aceptó temer por su vida por que ha sido intimidado por aquellos grupos que se encuentran detrás de los raptos de ilegales, entre los cuales dijo están coludidos desde políticos hasta agentes federales y del Instituto Nacional de Migración.
Mencionó que el Istmo de Tehuantepec puede ser considerada como la capital del secuestro en América Latina, por el elevado número de delitos que se cometen en esta modalidad, sin haber acciones que detengan a los responsables.
“El Istmo es una zona muy cotizada de migrantes donde operan bandas internacionales de delincuentes”.
En una conferencia de prensa celebrada en el albergue “Hermanos del Camino”, que se localiza en Ciudad Ixtepec, el pastor dijo que las amenazas son muchas.
La ultima dijo, fue entregada a través de un colaborador muy cercano de su equipo de trabajo, y en la nota se advierte que tanto “Los Zetas” como políticos, han ofrecido dinero a varios asesinos a sueldo para que me maten”.
En su versión, los delincuentes conocen su misión, porque ha persuadido a varios ilegales a cambiar de rumbo ante el riesgo que corren al llegar a territorio mexicano.
Solalinde, dijo que gobierno mexicano tiene que empezar a tomar medidas de seguridad extrema y emergente, como sellar la frontera sur, a fin de blindarla de la incursión de bandas criminales.
De acuerdo con el párroco, tras las pesquisas que realiza las fuerzas federales, los ilegales secuestrados el pasado 16 de diciembre, cuyo paradero se desconoce-, “ya fueron sacados del territorio oaxaqueño, tras ser considerada una tierra caliente”.
“Creemos que los plagiados ya fueron sacados de Oaxaca, y es muy es posible que ya estén en la ciudad de México o con rumbo a la frontera norte para ser sujeto de un trueque de mercancías”.
Recordó que la primera vez que se tuvo notificación del caso, fue cuando la madrugada del pasado 17 de diciembre al albergue “Hermanos del Camino” de Ciudad Ixtepec, en Oaxaca, arribo un guatemalteco, que casi enmudecido relato como sobrevivió y escapo al secuestro perpetrado en la zona de Chahuites, cuando hombres armados, se llevaron a varios de sus compañeros, tras detener el ferrocarril del Istmo, también conocido como “La Bestia”.
“Nosotros no mentimos y hemos desde entonces lanzado una enérgica protesta por lo ocurrido, lamentablemente las autoridades de migración han tratado minimizar lo ocurrido”.
Milenio
