El secretario de Hacienda y Crédito Público, Ernesto Cordero, anunció que a partir de esta semana se implantarán medidas para facilitar el refinanciamiento de la deuda de los estados, principalmente de aquellos con niveles elevados.
En un mensaje a través de internet, el funcionario dijo que si bien la deuda de las entidades federativas del país no significa un problema generalizado, al ubicarse en un nivel de 2.5 por ciento como proporción del producto interno bruto (PIB), hay algunos estados que requieren operaciones de refinanciamiento para mejorar su posición fiscal.
“En el gobierno federal estamos convencidos de que la deuda de los estados con problemas no se debe solucionar redireccionando recursos federales del Presupuesto de Egresos, por el contrario, la respuesta a estos problemas sólo puede llegar de la mano de medidas a nivel local que fortalezcan la capacidad de generación de ingresos y control de gastos”, explicó.
Ernesto Cordero aseguró que una situación similar fue lo que llevó a países europeos a estar en problemas de insostenibilidad en sus finanzas públicas, esto al aumentar su deuda sin garantizar la existencia de más recursos y no impulsar medidas de control de gasto, con el consecuente deterioro del entorno económico internacional.
De acuerdo con información de la Secretaría de Hacienda, entre las entidades con mayor nivel de endeudamiento como porcentaje de sus ingresos totales se encuentran Coahuila, Nuevo León y Quintana Roo.
La semana pasada, la dependencia resaltó el caso de Coahuila, entidad que pasó de una deuda registrada por 500 millones de pesos en 2005 a 8 mil millones en marzo de 2011.
Sin embargo, la deuda de esa entidad asciende a 32 mil millones de pesos, esto por los montos que se contrajeron con intermediarios financieros y que no se le reportaron a la SHCP.
Las medidas de apoyo que se ofrecerán a las entidades federativas para el refinanciamiento de su deuda serán a través del uso de garantías bursátiles del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos.
“La Secretaría de Hacienda ya se encuentra trabajando con algunos gobierno estatales que necesitan mejorar su perfil de deuda. Para aquellos que todavía no lo hacen, la dependencia se encuentra en la mejor disposición para trabajar con ellas a través del uso de herramientas innovadoras en la banca de desarrollo”, detalló Cordero.
Algunos gobiernos estatales que ya lo trabajan son Michoacán, Nuevo León, Veracruz y Quintana Roo.
Cordero Arroyo adelantó que durante esta semana se anunciarán medidas adicionales a través de la banca de desarrollo para facilitar la participación de pequeñas empresas mexicanas en nuevos proyectos de infraestructura.
Las medidas, explicó, harán más eficiente el financiamiento de proyectos a través de operaciones en el mercado de deuda.
Ambiente nervioso
El titular de Hacienda dijo que aunque en los últimos días se apreció “algo” de estabilidad en los mercados financieros, aún persiste el ambiente incierto y nervioso, esto por la compleja situación de Europa y la evolución económica en Estados Unidos.
Por ello, el funcionario insistió en que se debe preservar la estabilidad financiera del país, incrementar la competitividad externa de la economía y apuntalar la deuda interna.
“En este entorno de incertidumbre, en el que hoy más que nunca resulta de vital importancia que el Ejecutivo y el Congreso de la Unión trabajemos de manera coordinada para dar a la población las respuestas que exigen de nosotros”, concluyó Ernesto Cordero.
Economía débil
••• En México se advierte desempleo, devaluación del peso e incremento de pobreza ante la caída de los mercados financieros internacionales y las perspectiva de que el producto interno bruto oscilará entre 3.5 y 4 por ciento para finales del 2011, en lugar del 4.6 por ciento proyectado por el FMI, estimó César Armando Salazar, del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM.
“Este menor dinamismo, advirtió el investigador, podría generar incremento en el desempleo y más desigualdad que también agudizaría la pobreza. En caso de un choque financiero externo de grandes magnitudes no se cuenta con un blindaje suficiente para afrontarlo”, dijo.
En Estados Unidos “llegaron a un acuerdo inicial y la consecuencia fue una reducción en la calificación de su deuda y lo más preocupante para México, alertó, es que ese país reducirá su actividad económica”.
“El problema es si miras hacia dentro, tenemos una economía debilitada que crece por debajo de lo que debería para crear los empleos necesarios y bien remunerados, lo que ocasiona graves problemas de desigualdad y, al mismo tiempo, alimenta un mercado interno débil”, comentó Salazar López.
Milenio