Lo que pasa en Las Vegas, se queda en Las Vegas. Ayer lo que se quedó en Las Vegas fue el sueño de Juan Manuel Márquez de ser cinco veces campeón del mundo, al caer por decisión dividida ante el campeón estadunidense Timothy Bradley, quien superó al mexicano sin muchos problemas.
El Thomas and Mack Center de Las Vegas, Nevada, vio como el peleador de 40 años no pudo frenar a un rápido californiano 10 años más joven que él, ya que a base de contragolpeo y velocidad logró hacer fallar al Dinamita, para que al final del duelo los jueces vieran ganador a Bradley con dos tarjetas de 116-112 y 115-113, mientras en una se dio a Márquez el triunfo por un 115-113.
Al inicio de la contienda ambos peleadores resultaron muy conservadores, pues utilizaron el round para estudiarse y lanzar algunos golpes para marcar. Un descuido de Bradley abrió la posibilidad de Márquez de conectar dos volados que no se quedaron sin respuesta por parte del californiano.
Para los últimos segundos del segundo round dejaron atrás la guardia y la estética y acambiaron golpes, Marquez se llevó la peor parte al recibir un volado antes del campanazo que mandó a descanso.
Márquez buscó imponer su propio ritmo en la pelea pero la velocidad de Bradley seguió siendo un punto que no definía, pero incomodaba su plan de trabajo. Bradley siguió presionando de manera inteligente sin lograr hacer daño en el mexicano, pero sin desperdiciar puntos.
Tres asaltos que cargaban la tendencia de la pelea hacia el estadunidense, quien para el cuarto round aprovechó para frustrar a su opononente y con golpes a velocidad y movimientos laterales con rapidez, La Tormenta del Desierto se le hacía de humo al peleador mexicano que lucía molesto por no poder llevar a cabo su plan de trabajo como lo tenía pautado.
Después de hacerlo fallar dos de cada tres golpes, Bradley le agregó más sabor a la contienda en el quinto episodio al soportar un gancho a las zonas blandas del capitalino y sacarle la lengua en señal de que no le hizo daño. Márquez intentó cerrar el round a su favor, pero muchos de sus golpes se quedaron de nuevo en aire, en lo que fue el round más cerrado.
Enrojecido por los golpes, aunque no muy potentes pero si constantes, Juan Manuel inició el séptimo episodio presionando con la firme intensión de inclinar la balanza a su favor, pero el arriesgue fue demasiado y tras fallar en varias ocasiones volvió a ceder el round.
El cansancio y desesperación por no encontrar una solución clara comenzaron a hacer mella y para el octavo Márquez comenzó a mostrar los estragos de la pelea, mientras Bradley, con calma, seguía sumando puntos.
El noveno round, luego de mantener las cosas en orden —aprovechando la falta de presión por parte de Márquez— Bradley siguió haciendo un trabajo que le permitiera mantener la cerrada ventaja que obtuvo a partir del sexto episodio.
En el décimo rollo el capitalino fue lastimado con una potente derecha que lo dejó herido, pero sin visitar la lona. Márquez terminó el round buscando presionar y recuperar, pero poco pudo hacer ante un escurridizo e inalcanzable campeón.
Penúltimo episodio fue muy similar a los últimos cuatro con un Márquez incapaz de cerrar las salidas de un habilidoso Bradley, quien siguió capoteando la mayor parte de los envíos, mientras conectaba dos de cada tres golpes.
Al final de la contienda, Márquez buscó frenar a Bradley pero lo único que obtuvo fue terminar medianamente lastimado y con otro amago de caer a la lona. El estadounidense, quien reconoce no tener pegada, decidió no arriesgar y esperar a que sonara el campanazo final y así retener su título.
Con esta victoria, el mexicano vio acabado el sueño de verse coronado campeón en cinco divisiones diferentes y de paso sumó su séptimo descalabro profesional; mientras que Bradley retuvo por segunda ocasión la corona Welter de la Organización Mundial de Boxeo que le arrebató a Manny Pacquiao en diciembre pasado.
T. BRADLEY / CONCEPTO / J. M. MÁRQUEZ
32 / Peleas / 63
31 / Ganadas / 55
12 / Por nocaut / 40
0 / Perdidas / 7
0 / Por nocaut / 0
0 / Empates / 1
Agencias