Feligreses de la parroquia de la inmaculada de Juquila realizaron una protesta singular en las instalaciones de la Procuraduría de la Defensa del Menor, la Mujer y la Familia a favor del párroco Manuel Arias Montes, a quien las autoridades eclesiásticas pretenden destituir por denunciar diversos casos de pederastia.
Con oraciones y cantos, los hombres y mujeres acusaron al arzobispo José Luis Chávez y al apoderado legal de la arquidiócesis de Antequera, Wilfrido Mayrén Peláez “Padre UVI” de encubrir a Gerardo Silvestre Hernández, sacerdote señalado de violar a 45 niños en la Sierra Norte.
Encabezados por Evelia López Sumano, los manifestantes aseguraron que debido a la denuncia realizada por Arias Montes, los representantes de la iglesia católica pretenden destituirlo de su cargo.
“Es una injusticia ya que lo único que ha hecho el párroco es evidenciar y defender a los niños que fueron víctimas del sacerdote Silvestre a quien defiende Chávez Botello”, expuso la mujer quien se mostró indignada con esta situación.
El sacerdote quien se atrevió a denunciar los casos de pederastia había presentado una denuncia ante la entonces Procuraduría de Justicia de Oaxaca por amenazas, bajo la clave 78/AEI/2016, contra el arzobispo Chávez Botello, el apoderado legal de la Arquidiócesis de Antequera-Oaxaca, Francisco Wilfrido Mayrén Peláez.
Por la mañana el gobernador Gabino Cué Monteagudo sostuvo un encuentro con Chavéz Botello, quien ha presentado su renuncia por antigüedad.
Carina García/Libertad-Oaxaca.info