El costo de la canasta alimentaria se encareció 12 por ciento en los últimos seis años, luego de pasar de 805 pesos al cierre de 2006, a mil 148 en el tercer trimestre de 2012, reveló el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Derivado del incremento en el costo de los principales productos de consumo básico, aumentó el número de personas que no pudo adquirirla por lo cual cayó en la llamada tendencia laboral de la pobreza.
Según el reporte trimestral del Índice de Tendencia Laboral de la pobreza, que elabora el Coneval, en los últimos seis años creció 26 por ciento la población ocupada que no pudo adquirir la canasta alimentaria con el ingreso de su trabajo.
La canasta alimentaria está compuesta por 37 articulos básicos, entre los que se encuentran maíz, trigo, arroz, cereales, carne de res, y de cerdo procesadas, de pollo, pescados frescos, quesos, derivados de la leche, huevos, tubérculos crudos o frescos, verduras y legumbres frescas, leguminosas, frutas frescas, azúcar y mieles, bebidas no alcohólicas y otros.
Esta situación se agudizó con mayor intensidad en la zona urbana de México, donde el crecimiento de este problema fue de 36 por ciento en el periodo referido, mientras que en la parte rural del país el incremento fue de 6 por ciento.
Sin embargo, por entidad federativa las condiciones fueron diferentes, pues en algunas la incapacidad para comprar la canasta alimentaria con el ingreso de las personas creció hasta cuatro veces más que el promedio nacional.
Es el caso de Nuevo León, que vio prácticamente duplicar a su población trabajadora sin posibilidad de que su ingreso sustentara el costo de los alimentos básicos.
La entidad del norte en los últimos seis años, vio crecer la tendencia laboral de la pobreza en 102 por ciento.
La más reciente Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del INEGI reveló que al tercer trimestre del presente año, de 2.1 millones de trabajadores en Nuevo León, 67 mil 224 no reciben ingresos, mientras que 188 mil 581 ganan hasta un salario mínimo (mil 870 pesos al mes).
Baja California fue la segunda entidad del país con mayor crecimiento de la población incapaz de comprar la canasta alimentaria con su ingreso. En los últimos seis años creció 95 por ciento la población en esa condición.
Los datos del INEGI muestran que en esa entidad hay 1.4 millones de trabajadores, de los cuales 93 mil perciben hasta un salario mínimo y 116 mil 450 ni siquiera obtienen alguna remuneración monetaria por su actividad.
También se sumó a la lista donde mayor crecimiento de pobreza laboral hubo Baja California Sur, con 84 por ciento; Sonora, con 66.5; Sinaloa, con 64.6; Distrito Federal, con 61.6; Tamaulipas, con 61.2; Chihuahua, con 60, y Quintana Roo, con 50.5 por ciento.
Las entidades donde se presentó el menor incremento de personas con esa incapacidad adquisitiva se dio en Oaxaca, con 2 por ciento; Campeche, con 2.4 por ciento; Jalisco, con 3.8 por ciento, y Veracruz, con 7.8 por ciento.
Chiapas, por su parte, contrastó con el resto de las 31 entidades federativas, pues fue la única donde, al contrario, la población que no podía comprar una canasta alimentaria disminuyó.
“Si el índice sube significa que aumenta el porcentaje de personas que no pueden comprar una canasta alimentaria con el ingreso de su trabajo. El índice no constituye una medición de pobreza, porque no comprende todas las fuentes de ingreso ni todas las dimensiones de la medición oficial de ese flagelo dado a conocer por el Coneval en diciembre de 2009”, aclaró el organismo.
Agencias