A veinte días de asumir la dirigencia, el Comité Ejecutivo del Sindicato de los burócratas estatales todavía está en proceso de recepción, y encontró un “desorden preocupante”, reveló el secretario general Juan Rafael Rosas Herrera.
“Es preocupante la forma en que se encontró el edificio, porque cuando veníamos a tramitar las prestaciones era otro en cuestión de muebles, y cuando nos entregan nos encontramos con otra imagen. No podemos explicar qué fue lo que pasó, vamos a analizar cuestiones administrativas para saber de quién eran esos muebles, tal vez de los secretarios o en comodato, pero faltan muebles de todas las oficinas”.
Juan Rosas admitió la desaparición de escritorios, sillas y equipo de cómputo que “se supone, al estar aquí, que eran del Sindicato. Estamos adquiriendo lo necesario, porque no podemos disponer de las cuotas a libre albedrío” indicó.
El nuevo dirigente abundó que su sucesor Víctor Hernández Bustamante dejó muchos adeudos, por concepto de impuesto predial de los inmuebles, tenencia de vehículos y de línea telefónica que no se cubrió.
De sus ofrecimientos de campaña, el líder de los burócratas indicó que la asamblea general se está empezando a trabajar, aunque aclaró que por los tiempos electorales sería una irresponsabilidad efectuarla por ahora, “no podemos arriesgar a la base trabajadora, pero es un hecho que se va a realizar”.
Sobre la auditoría a la dirigencia saliente dijo que revisará a grandes rasgos qué es lo que pasó en el Comité Ejecutivo y bajará la información a la base trabajadora “para que me autorice hacer un gasto de las cuotas sindicales para hacer una auditoría”.
Reconoció que es sano auditar “y tiene que hacerse para saber el destino de las cuotas”, aunque justificó desde ahora que “la mayoría de las cuotas sindicales se gastan en el mantenimiento de los edificios y papelería, pero no hay que ocultarlo”.
De su relación con el Ejecutivo informó que ha habido acercamiento con el gobernador Gabino Cué desde antes del 31 de enero en que rindiera protesta, y por lo pronto el puente es el secretario de Administración, por lo que definió que “hay buena comunicación y relación de respeto”.
Recién acomodado en la silla de su oficina sindical, Juan Rosas pidió a la base trabajadora “que nos dé el beneficio de la duda y que nos dejen trabajar, para recobrar la confianza”.
Agencia JM