08:03 De la mano de su inspirado portero Alfredo Talavera, Toluca dio un paso adelante en busca de su décimo título en el futbol mexicano, tras empatar 2-2 con Santos en el partido de ida de la final del torneo Bicentenario 2010.
Los Guerreros no pudieron hacer valer su condición de locales y ahora están obligados a obtener la victoria este domingo en el estadio Nemesio Diez, donde los Diablos Rojos se han mostrado invencibles.
El conjunto choricero tiene todo en su favor para ganar la corona y confirmarse como el mejor equipo de los llamados torneos cortos. Esta noche, en un pletórico Nuevo Estadio Corona, estuvo cerca de llevarse la victoria, pero el chileno Héctor Mancilla falló un par de oportunidades claras para sentenciar la serie.
En emotivo duelo, Toluca lució como un equipo compacto y se impuso a las individualidades del Santos. Lo negativo para el cuadro mexiquense es que sobre el final del juego fue expulsado Manuel de la Torre y se perderá el partido de regreso.
Los aficionados locales ondearon pañuelos blancos para recibir a su equipo, en la primera final realizada en su nuevo inmueble. Y los Guerreros tuvieron el balón desde los primeros minutos, pero no pudieron crear ocasiones de gol, afectados porque Juan Pablo Rodríguez, un indiscutible durante todo el torneo, no pudo jugar debido a lesión.
Cuando las acciones estaban niveladas, Santos se fue al frente en el marcador al minuto 14. Fue en una jugada de José María Cárdenas por el lado derecho, quien desbordó a la defensa y cuando se disponía a disparar de atrás llegó su compañero Carlos Darwin Quintero; éste se enfiló al marco y venció a Talavera con un disparo a primer palo, en un error del portero escarlata que se quedó esperando el centro.
El conjunto mexiquense se mostró contundente, ya que empató el marcador en lo que fue prácticamente su primera llegada de peligro, a los 22 de acción. En un tiro de esquina, en jugada prefabricada, Sinha tocó al límite del área grande, donde el defensa Diego Novaretti conectó como auténtico delantero.
El argentino impactó de bote pronto y mandó un potente trallazo que pasó cerca del portero santista Oswaldo Sánchez, quien no pudo reaccionar ante la potencia del disparo.
El 1-1 enmudeció a los fanáticos y los rojos trataron de aprovechar el momento anímico. Conducidos por Sinha buscaron ser más ofensivos, pero los de la Comarca Lagunera se repusieron y nivelaron las acciones.
El timonel santista, Rubén Omar Romano, entendió que su equipo no tenía profundidad e ingresó a Daniel Ludueña, quien estaba en la banca recuperándose de una lesión. En su primer balón, el Hachita dio claridad a su equipo, pero Chema Cárdenas culminó la jugada con un tiro a las tribunas. El guardameta Talavera realizó una oportuna salida tras un pase filtrado a Quintero, pero la mejor ocasión fue para la visita a cinco minutos del final del partido.
Iván Estrada quiso salir jugando, pero dio pase a Mancilla, quien se encontraba sin marca en el área. Sin embargo, el goleador se precipitó y disparó a la colocación de Oswaldo, quien realizó una oportuna salida y desvió el esférico.
Para el complemento, Romano decidió quemar sus naves con el ingreso de Matías Vuoso, por Chema Cárdenas. Santos tuvo un amplio dominio del balón y prácticamente todo el duelo se realizó en la cancha visitante.
Sin embargo, los delanteros locales lucieron amontonados y no pudieron crear mayor peligro ante el cuadro de José Manuel de la Torre que se defendió con doble línea defensiva de cuatro elementos.
Los Diablos Rojos soportaron el acoso de los primeros minutos y a partir del 15 empezaron a crear llegadas. Se acercaron con disparos de Carlos Esquivel y Martín Romagnoli.
Era el aviso de lo que vendría después: al 67 mandaron un balonazo a Mancilla, quien aguantó la marca y tocó a la derecha, donde Sinha mostró toda su calidad al amagar a Jonathan Lacerda con la pierna derecha y disparar de zurda. Sánchez alcanzó a tocar el esférico, pero no pudo impedir que lentamente entrara a su portería.
Santos y el público resintieron el golpe. Toluca estuvo cerca de sentenciar la serie tres minutos después, pero Mancilla volvió a fallar, al disparar desviado y sin fuerza luego de un buen desborde de Esquivel.
Más por entusiasmo que con claridad, Santos trató de acercarse y entonces surgió la figura de Talavera.
Al minuto 76, Quintero conectó de volea un fuerte disparo, pero el guardameta tuvo una reacción felina y desvió a córner. Todavía en el cobro del tiro de esquina Talavera controló sin problemas un cabezazo sin fuerza.
Muy agotado, Sinha dejó su lugar a Manuel Pérez y los rojos perdieron la salida.
El Hachita Ludueña, lejos de su mejor nivel, apareció hasta los minutos finales. Al 82 mandó un tiro rasante y a la izquierda, pero Talavera siguió en plan grande y desvió con las uñas cuando la tribuna ya coreaba la anotación.
El guardameta nada pudo hacer al minuto 84, cuando en otra jugada de córner el balón pasó entre todos y llegó al área chica, donde Vuoso conectó con punterazo y logró el 2-2 que encendió los ánimos de los fanáticos. Sólo con un gol así, a quemarropa, pudo ser vencido el inspirado arquero rojo.
Sobre el final, los Guerreros se lanzaron con desesperación en busca del gol que les diera la ventaja, pero los Diablos se defendieron con orden, aunque Manuel de la Torre se excedió en la fuerza y fue expulsado por una plancha sobre Arce.
La Jornada