El presidente Felipe Calderón anunció la salida del secretario del Trabajo, Javier Lozano, y de la Función Pública, Salvador Vega.
El mandatario aceptó la renuncia de Javier Lozano a la secretaría del Trabajo y Previsión Social, y en su lugar designó a Rosalinda Vélez Juárez, quien fungía como procuradora federal de la Defensa del Trabajo.
Tras agradecerle a Lozano su labor “determinante” para conducir procesos tan complejos como la extinción de Luz y Fuerza del Centro, instruyó a Vélez Juárez a redoblar esfuerzos para fortalecer y hacer más eficientes las tareas de esa dependencia.
Su prioridad, dijo, es generar condiciones de empleo y facilitar la contratación entre empleadores y trabajadores, mediante el impulso de las ferias, el portal y el servicio nacional del empleo.
Milenio