A 16 años del aniversario de la muerte de una de las princesas más emblemáticas de la historia moderna: la princesa Diana, la policía británica analiza nueva evidencia sobre su accidente.
Scotland Yard anunció que realizará una nueva “evaluación” del suceso en el que murieron la princesa y su novio, Dodi al Fayed, además del chófer del automóvil que se estrelló en un túnel de París, la madrugada del 31 de agosto de 1997.
La Policía Metropolitana de Londres considera que la nueva información es “relevante y creíble” aunque no dejó claro si las investigación significarían una reapertura del caso que concluyó en 2008 y que encontró que el conductor se encontraba en estado de embriaguez durante el accidente.
Aunque la escueta declaración de la Policía Metropolitana sobre la nueva “evaluación” no ofrece pistas clara de las nuevas informaciones, es suficiente para resucitar las teorías conspiratorias que sugieren que la muerte de Diana fue el resultado de un complot entre el servicio secreto británico y el esposo de la reina Isabel.
El acaudalado egipcio Mohamed al Fayed, padre de Dodi, siempre ha sostenido que la pareja fue asesinada y que su muerte no fue resultado del acaso de los paparazzi, como se llegó a creer.
Agencias
