Juan Pablo Aragón Díaz, representante legal de José Javier Villacaña Jiménez, dio a conocer que en una diligencia llevada a cabo en el Juzgado Primero de lo Familiar se dieron a conocer los resultados de la prueba genética científica de ADN que fue solicitada por Ana Laura Carrasco Ayala, los cuales arrojaron que la probabilidad de paternidad biológica son del 0.0%, es decir, que está probada la nula relación genética y excluida su posible paternidad.
En entrevista, el abogado precisó que, en los resultados genéticos para la determinación de paternidad obtenidos, se observa exclusión en 14 de 22 marcadores genéticos, por lo que en términos legales “prevalece la hipótesis alterna que consigna que Javier Villacaña no es el padre biológico de la menor sino cualquier otro individuo de la población”.
Abundó que dicha prueba contó con cadena de custodia, procedimiento controlado que restringe su manejo por personas ajenas a quienes procesaron científicamente la prueba.
En tal sentido, Aragón Díaz pidió respeto a la definición de las instituciones de procuración de justicia que fueron elegidas por quien solicitó la prueba, así como a su representado, enfatizando que cualquier acción que sea relacionada con este proceso será debidamente documentada para dirimirla en el ámbito jurídico.
Cabe destacar que la cadena de custodia es un procedimiento por el cual se asegura la integridad de una muestra desde su toma hasta que sea rendido un informe y que tiene como objeto establecer la posesión de la misma en todo momento, así como evitar su destrucción, suplantación y contaminación, garantizando así que esta no sea desestimada o cuestionada.
En su calidad de abogado hizo un llamado al DIF estatal para que realice una evaluación psicológica a Ana Laura Carrasco Ayala, madre de la menor y pueda determinar si cuenta con la salud mental óptima para el cuidado de su hija, debido a que en repetidas ocasiones la ha expuesto ante los medios de comunicación y la sigue utilizando y envenenando, afectando su debido desarrollo.
Además, consideró que no respetar los resultados obtenidos por un proceso totalmente jurídico y una prueba científica en las circunstancias y condiciones que ella misma solicitó, sería un acto de demencia severa y desesperación.
Finalmente, confió en que las instituciones de procuración e impartición de justicia no cederán ante las presiones de la señora que ha manifestado contar con influencias por ser hermana del director de COESIDA, César Alfonso Carrasco Ayala.