Para “salvarse” de la crisis el Hospital de la Niñez Oaxaqueña Dr. Guillermo Zárate Mijangos (HNO), requiere entre 800 a 900 millones de pesos anuales para evitar el desabasto constante de medicamentos y un nuevo paro de labores.
La mitad del presupuesto del HNO, es decir 450 millones de pesos se destina a servicios personales como el pago a la nómina; 200 millones a la adquisición de fármacos y se requiere de unos 300 millones para culminar el área de infectología.
De acuerdo con estos cálculos realizados por los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), se han planteado tres rutas para poder mantener al nosocomio, mismo que fue cerrado por más de un mes ante el paro de labores de los empleados los cuales exigían garantías necesarias para continuar con el buen funcionamiento del mismo.
El titular de los SSO Celestino Alonso Álvarez precisó que se estudia la posibilidad de que el organismo público descentralizado (OPD)continúe como parte de la administración pública estatal con un presupuesto de soporte necesario para cumplir con las necesidades de los requieren el servicio, así como de los trabajadores.
Aunque también otra de las rutas sería que el OPD forme parte del Sistema Estatal de Salud, en este caso se tendría que realizar una evaluación correspondiente y presentarla ante la Comisión Nacional de Salud quien en caso de su visto bueno la remitiría a la Secretaría de Salud para que sea incorporada al proyecto de la ley de egresos 2018 y someterla a consideración del Congreso de la Unión.
La última propuesta es que el nosocomio se incorpore a la administración federal, bajo el mismo procedimiento anterior y funcione como el Hospital de Especialidades.
El secretario de los SSO expuso que sería en octubre próximo cuando se determine por cuál de estas tres vías planteadas podrían inclinarse para asegurar los servicios en el HNO.
Carina García