La ministra francesa de Relaciones Exteriores, Michlèle Alliot Marie, anunció el domingo su renuncia al cargo en una misiva en la cual afirma que no cometió “ninguna falta” y se defiende de una “campaña” de “ataques políticos y mediáticos”.
“Aunque tengo el sentimiento de no haber cometido ninguna falta, he decidido abandonar mis funciones como ministra de Relaciones Exteriores“, afirmó Alliot Marie en la carta dirigida al presidente francés Nicolas Sarkozy de la cual la AFP obtuvo una copia.
En su misiva, Alliot Marie, de 65 años, se defendió de la “campaña” de “ataques políticos y mediáticos” de la que es blanco “desde hace semanas” con el objetivo de “crear sospechas (…) y amalgamas”.
“Desde hace 15 días, mi familia sufre de parte de algunos medios de comunicación un verdadero acoso en su vida privada, para intentar encontrar algo para debilitarme”, afirma Alliot Marie en la carta que entregó en mano al presidente Sarkozy al principio de la tarde, según fuentes de su gabinete.
“Tengo hacia usted una muy gran lealtad y amistad como para aceptar que su acción internacional pueda, de una u otra manera, verse perjudicada”, aseguró antes de pedirle que “acepte mi renuncia”.
La carta fue hecha pública minutos después de que la excanciller mantuviera una reunión de una media hora con el primer ministro, Francois Fillon, en Matignon, sede de la jefatura de gobierno.
Sus polémicas vacaciones navideñas en Túnez en medio del levantamiento popular que derrocó al régimen autoritario de Ben Alí, sus vínculos con empresarios cercanos al dirigente tunecino y los negocios que los padres de la ministra concluyeron por esos días, focalizaron las críticas en Alliot Marie.
A ello se sumó el conflicto diplomático abierto con México por el caso Florence Cassez.