Juan Díaz de la Torre fue “electo por unanimidad” como secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación(SNTE) hasta el año 2012, en sustitución de Rafael Ochoa Guzmán, dio a conocer la presidenta de la organización,Elba Esther Gordillo Morales.
Juan Díaz de la Torre formalizó ayer el cargo de segundo de a bordo en el sindicato, que venía desempeñando de facto desde el 7 de septiembre de 2010, cuando Ochoa Guzmán retornara solamente a sus actividades en el Senado de la República.
Desde entonces, Díaz ha sido la cabeza de representación del SNTE en las negociaciones con la Secretaría de Educación Pública (SEP) para las reformas que fueron anunciadas, la semana pasada, sobre los programas de estímulos a los docentes.
Durante la 31 sesión extraordinaria del Consejo Nacional del SNTE, los más de 300 dirigentes concejales aprobaron la propuesta de la presidentaGordillo Morales. Con ello, aseguran los líderes, se inició “la renovación generacional del SNTE”.
De acuerdo con versiones de los asistentes a la reunión, que se realizó a puerta cerrada en la sede del sindicato, en el complejo Puerta del Sol ubicado en la exclusiva zona de Santa Fe, fue al mediodía de ayer cuando Rafael Ochoa Guzmán entregó de propia mano a Elba Esther Gordillo “su renuncia” al cargo de secretario general.
Puso fin así al cargo que asumió en el Congreso Nacional realizado en El Saucito, Chihuahua, en diciembre de 2000.
Ante el pleno de la dirigencia, ahora reunida en sesión del consejo nacional, el documento fue turnado al segundo vicepresidente de la reunión, Cupertino Alejo. El argumento que Ochoa esgrimió fue el incumplimiento del estatuto general de la organización, por lo que presentaba su “licencia definitiva”, ante la incompatibilidad de su cargo de elección popular con el de la dirigencia nacional.
Más tarde, la presidenta Elba Esther Gordillo, señaló en entrevista que el “consejo se acordó dar un plazo para que el maestro (Ochoa) cubriera un tiempo (la doble labor), pero ningún dirigente puede tener un cargo de puesto de elección popular y la dirigencia.
“Él decidió que iba ir a cumplir su cometido al Senado, y por lo tanto, las facultades que nos da el propio consejo, que no es un congreso nacional, únicamente se hizo una reestructuración para la que había facultades (el artículo 72, fracción 17, señala que para que pueda darse la sustitución de cualquiera de sus integrantes se puede hacer a través de un consejo)”.
Debido a la ambigüedad del estatuto, según comentaron dirigentes sindicales, lo que se hizo fue “un salvoconducto para no convocar al congreso general y realizar la renovación de todo el comité ejecutivo, incluida la presidencia”.
Ante los concejales reunidos, el proceso a seguir fue el de inquirir a la suplente, la también senadora Irma Martínez, si deseaba asumir el cargo de Ochoa, pero ella declinó.
Con base en las reformas adoptadas en el consejo nacional realizado en Tijuana (2007), la presidenta Elba Esther Gordillo tiene la “facultad de reestructurar el comité ejecutivo cuando sea necesario”, y se presentó el listado de los nuevos integrantes que acompañarán a Juan Díaz. “Quienes estén de acuerdo, sirvan manifestarlo”, se escuchó en el salón, y acto seguido el pleno votó de manera unánime, abierta y a mano alzada.
En la reestructuración, Ochoa Guzmán estará al frente del Colegiado de Acción Política y será el encargado de coordinar la estrategia nacional de elecciones rumbo a los relevos gubernamentales en el Estado de México y del 2012.
Dirigentes cercanos a Ochoa Guzmán aseguraron que “nunca va a hacer nada en contra de ella, porque acepta las reglas de juego. Ha demostrado su lealtad y apego a la institucionalidad”.
Elba Esther Gordillo, que públicamente se refiere a Ochoa Guzmán como su “compañero de batallas”, rechazó que el relevo signifique una fractura.
Desde abril de 2008, el “distanciamiento” entre Rafael Ochoa Guzmán y Elba Esther Gordillo se hizo público. En aquel momento, se señaló que el secretario general encabezaba una de las corrientes de disputa por el control del sindicato frente a las hijas de Gordillo.
La llegada de Juan Díaz, afirman, es el fortalecimiento del subsecretario Fernando González y la hija de la profesora, Maricruz Montelongo.
En su primer mensaje a la dirigencia sindical, Juan Díaz de la Torre resaltó que su labor será de continuidad y en defensa del sindicalismo.
“Son grandes, complejos, los retos y desafíos que enfrenta el movimiento sindical”, dijo el nuevo secretario general.
El Universal
