* Cambió radicalmente el presente y futuro político de Alejandro Murat Hinojosa. ¡Urge fuerte golpe de timón en el gabinete!
* Gobierno regional a ras de tierra para fortalecer el acercamiento con la gente y recuperar el poder en las elecciones de 2022.
Alejandro Murat Hinojosa está plenamente consciente que su presente y futuro político personal, familiar y de su gobierno, cambió radicalmente con el “carro completo” obtenido por Manuel Andrés López Obrador (MALO).
Perder casi todos los escaños, curules federales y locales, y los principales municipios, no es asunto menor. Y mucho menos lo es todavía, perder la mayoría en el Congreso del Estado, lo que le dificultará gobernar en los próximos años.
Por supuesto que, gracias a Dios y a la inteligencia de los seres humanos que nos asemeja a Él, todos los problemas tienen solución en este mundo, incluyendo la muerte, que se preocupen quienes quedan vivos. La energía vital del muerto solo se transforma.
Ciertamente, lograr que la mayoría absoluta de los legisladores de Manuel Andrés López Obrador, dueño del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), aprueben las Iniciativas preferentes del gobernador encarecerá sus votos.
Hoy por hoy, en la LXIII Legislatura local, el arancel de los “pagos por evento” oscila entre 500 mil y un millón de pesos por voto. Pero Pepe y Alejandro Murat saben que en política todo lo que cuesta dinero, finalmente sale barato.
En consecuencia, sonó la hora de dar un fuerte golpe de timón en el gobierno de Murat. Es imperioso el relanzamiento de un Gobierno Moderno con los pies bien puestos en la tierra. ¡Urgen, los cambios en el gabinete legal y ampliado!
A querer o no, guste o no, está en riesgo la realización del Milagro Oaxaqueño prometido en campaña por Alejandro Murat y comprometido ya como gobernador del Estado. ¡Hace agua el resurgimiento de la esperanza de cambio!
No obstante el compromiso de su amigo el presidente Enrique Peña Nieto de apoyarle a concluir las dos supercarreteras a las regiones de la Costa y del Istmo de Tehuantepec en 2018, dicha promesa no ha sido cumplida.
En su fuero interno sabe mejor que nadie que de ninguna manera, basta, que él y su padre, Pepe Murat, sean amigos de MALO, el presidente electo, y que se apoyen mutuamente desde que éste era del PRI y, luego del PRD.
Es más que evidente, público y notorio, el respeto y cordialidad que guarda López Obrador para con ellos. A lo largo de las cinco giras que realizó durante su campaña por Oaxaca, jamás lanzó una sola crítica a Alejandro Murat.
Pero, además, con la genial perversidad que caracteriza a Pepe Murat, con mucha antelación construyó puentes de plata en el gobierno de Alejandro con el controvertido político ex priista y ex perredista, hoy líder máximo de la revolución morenista.
Prueba de ello, se entregó en charola de plata la Presidencia de la Mesa Directiva de la LXII Legislatura del Congreso del Estado a MALO, a través del diputado ex perredista, ex petista, hoy de Morena, Jesús Romero López.
Sí, querido lector, nos referimos al tristemente célebre invasor de tierras “Charbelín”, al que como saludo el ex gobernador Ulises Ruiz llamaba “hijo de puta” y echaba en cara las carretadas de dinero que le daba durante su gobierno.
Frente a esta realidad, dos días después de la debacle electoral del PRI-gobierno, el gobernador Alejandro Murat convocó a la mayoría de los integrantes de su gabinete legal y ampliado para reflexionar conjuntamente sobre la derrota.
Llamó poderosamente la atención de los observadores que el Secretario General de Gobierno, Héctor Anuar Mafud, no haya estado presente en la importante reunión. Lo mismo ocurrió con el secretario de Finanzas, Jorge Gallardo Casas.
La inesperada ausencia del responsable de la política interior del Estado llevó a que algunos cacha granizo se calentaran antes de tiempo y buscarán presionar al gobernador para acelerar el cambio de Héctor Anuar Mafud en la Secretaría General de Gobierno.
La misma maniobra manejaron para presionar a Alejandro Murat y acelerar el cambio en la presidencia del Comité Directivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional. Los mensajes en ese sentido inundaron las redes sociales.
No se descarta, desde luego, que efectivamente el todavía senador Jorge Toledo Luis, uno de los nuevos millonarios en la región del Istmo de Tehuantepec, pudiera llegar a la Secretaría General de Gobierno y Marco Antonio Hernández Cuevas.
La incorporación de ambos al Gobierno de Oaxaca y al PRI, formaría parte de la continuación de la “Operación Cicatriz” iniciada desde su campaña por el mandatario estatal con la entrada al principio de su gobierno de algunos ulisistas.
Además, es necesario reconocer y premiar el trabajo del otrora ramirezpugista Marco Antonio Hernández Cuevas, ex gerente de la planta de Liconsa en Oaxaca, quien abandonó a su amigo y ex jefe Héctor Pablo Ramírez Puga Leyva, y coadyuvó al triunfo de Raúl III.
Sabedor que las derrotas son huérfanas, que enseñan más que los triunfos y que éstas no son para siempre, amén que las crisis son oportunidad de crecimiento, con visión, sensibilidad y madurez, Murat hizo un sorpresivo anuncio.
El titular del Poder Ejecutivo estatal dio a conocer el relanzamiento de su Gobierno con miras a dar cumplimiento a sus propuestas de campaña y compromisos de sacar, por fin, del ancestral rezago y la marginación a Oaxaca.
En los próximos tres años y medios antes que destapen al senador Raúl Bolaños Cué como candidato del PRI a la gobernación de Oaxaca, Alejandro Murat impulsará un gobierno a ras de tierra en el Estado para recuperar el poder en las elecciones de 2022.
Desde ya podemos adelantar que el priista Raúl III disputará la gobernación de Oaxaca con Oswaldo García Jarquín, condicionado a los resultados exitosos que éste pudiera dar en la presidencia municipal capitalina.
Oswaldo Junior puede hacerlo, pues cuenta con la amplia experiencia político-administrativa de su padre, Oswaldo García Criollo, ex dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional, ex diputado federal priista por su tierra natal y ex director general del COBAO.
Al alcalde capitalino del Movimiento de Regeneración Nacional, se sumará Susana Harp Iturribarría, por cierto, familiar de Raúl III, independientemente que Benjamín Robles Montoya y Salomón Jara Cruz buscan “agandallarse” la candidatura.
Alejandro Murat relanzará su administración con apoyo de las nuevas tecnologías de la información, a fin de contar, ahora sí, con un Gobierno Electrónico, pero al mismo tiempo con un Gobierno Regional de manera itinerante en las ocho regiones.
El objetivo fundamental es mantener de manera intensa un acercamiento permanente con los cuatro millones de habitantes de la entidad a lo largo y ancho del territorio oaxaqueño vía un Gobierno Territorial.
@efektoaguila