En nombre del Grupo Parlamentario del PRD, el senador Benjamín Robles asentó que el Senado de la República, con la aprobación intempestiva de la reforma política, perdió la oportunidad de darle a México una trascendental generación de reformas electorales, que diera certidumbre y legitimidad a los procesos electorales de los tres órdenes de gobierno.
Ante el pleno senatorial, el legislador oaxaqueño soltó:
“Sin embargo, compañeras y compañeros, también quiero decir que el oficialismo con la participación de compañeras y compañeros senadores de otras fuerzas políticas, no se atrevieron a crear una autoridad nacional encargada del universo de las elecciones que disminuyera el dispendio de recursos económicos tanto en la preparación como en la organización de las elecciones. Y tampoco mermaron el monopolio del sufragio en las entidades federativas”.
“Compañeras y compañeros senadores hay que decirlo y hay que aceptarlo para poder corregirlo en algún momento: nos estamos quedando cortos en esta materia”.
Refirió que el Pacto por México habla de crear una autoridad electoral de carácter nacional y una legislación única, que se encargue tanto de las elecciones federales, como de las estatales y municipales.
En ese sentido, el PRD, a través de su dirigencia, le apostó a una verdadera y trascendental generación de reformas electorales, dijo.
“Porque expresó su voluntad política para suscribir ese acuerdo que tristemente no pudo cumplir ni siquiera un año, porque como lo dijo el dirigente nacional de mi partido, como lo expresamos los senadores, el propio Presidente de la República se encargó de romperlo faltando a su palabra”, asentó Robles Montoya.
Señaló que el dictamen aprobado en la madrugada de este miércoles es sólo un esbozo de lo que pudo ser una legislación de avanzada.
Consideró que la organización electoral era perfectamente posible por una instancia única federal y representaba una forma de descontaminar los órganos electorales y nombrar funcionarios profesionales y honorables.
“En el PRD, compañeras y compañeros, compartíamos el proyecto que demostraba la voluntad y visión de Estado, que entendíamos se requiere y que se requiere una profunda reingeniería electoral”, reiteró el perredista.
Y que mencionó que todos sabían que el realizar sólo reformas o parches prolongará los vicios que han minado la credibilidad de los resultados electorales y, por tanto, la legitimidad de la propia democracia mexicana.
Retomó que cuando el PRD suscribió el llamado y extinto Pacto por México surgió, de la premisa de conciliar las posturas plenamente identificadas por los partidos políticos más importantes de este país en México, crear un instituto electoral capaz de organizar, preparar, fiscalizar y validar todos los comicios que en el ámbito federal, en los ámbitos estatales y municipales; y muchas otras cosas más que hoy se quedan en el camino.
“Hoy, sin embargo, el dictamen de esta reforma, hay que decirlo con esas palabras, es medianoplacista”, reprochó a sus compañeros congresista.
Sin embargo, reconoció que pudieron rescatar temas importantes como la reelección legislativa, que es prácticamente un hecho en la práctica; la autonomía de la procuración de Justicia; y los pesos y contrapesos en la designación del gabinete por parte del Legislativo.