En Xoxocotlán, uno de los municipios conurbados a la capital, es tradicional la velada a las tumbas; mientras que en el Panteón General o San Miguel el encendido de nichos se ha convertido en un atractivo turístico.
Sin embargo, comunidades como Mitla y Tlacolula, las costumbres son totalmente diferentes. Aquí la convivencia con quienes han partido se da en cada uno de los hogares.
Antes del mediodía familias enteras acuden al panteón para invitar a sus difuntos a disfrutar de los alimentos y de la convivencia con los “vivos”.
De acuerdo a los propios comerciantes, en promedio en estas festividades se eroga entre cinco a 10 mil pesos en estos días. Flores, frutas, pan, mole y aves de corral son las más demandadas en estas fechas.
Con ello las autoridades estatales y el “Manjar de Todos los Santos”, actividades programadas para estas celebraciones en la capital reactivarán la afluencia turística que se espera aún repunte hasta en un 80 por ciento.
Carina García/Libertad-Oaxaca.info
