Los sismos del mes de septiembre del 2017 dejaron serias afectaciones al patrimonio de las familias istmeñas, generalmente sabemos de los casos en que las casas de esta zona colapsaron, pero poco conocemos de las afectaciones que sufrieron los militares y sus familias que radican en esta región en donde también perdieron su patrimonio.
Blanca Estela Sánchez Ruelas, esposa del Teniente Coronel Zenón Cisneros Martínez -destacamentado en la 46 zona militar con sede en Ciudad Ixtepec-, relata la situación de emergencia que padecieron ante el sismo de 8.2 grados ocurrido la noche del 7 de septiembre de 2017.
“Fue una experiencia fuerte al ver los daños, también al estar y enfrentar solas las familias la contingencia, porque en el primer minuto que sucedió todo los maridos salieron a ayudar y ya no supimos nada de ellos. Teníamos mucha incertidumbre sobre qué va a pasar, ver nuestro hogar afectado, pero también orgullosas de saber que nuestros esposos están haciendo una labor altruista”.
Debido a la intensidad del sismo, la Unidad Habitacional Militar de Ixtepec -construida en 1960 y en donde habitan la mayoría de las familias de los militares- quedó inhabitable, las familias tuvieron que ser desalojadas y las casas ser demolidas.
“Cada quien se fue a donde se pudo acomodar, al ver esto mandamos a nuestros hijos fuera de Ciudad Ixtepec, las esposas que nos quedamos nos unimos para apoyarnos y hacernos compañía, sobre todo porque nuestros maridos estaban ausentes”, dijo la señora Blanca Estela.
Originaria de Puerto Vallarta Jalisco, Sánchez Ruelas expresó que la Secretaría de la Defensa Nacional atendió de manera inmediata las condiciones de emergencia de las 60 familias que se vieron afectadas.
“Después del siniestro cuando nos desalojaron vimos mucho apoyo por parte de la Secretaría, nos apoyó y construyó muy rápido una nueva Unidad Habitacional, vimos una rápida respuesta porque realmente no teníamos un hogar donde estar y ni un familiar donde nos brindara alojamiento”.
Como esposas de militares –señala Blanca Estela-, saben que sus esposos están apoyando a mucha gente, por ello su ausencia es aminorada por ese orgullo que tienen de tener a su lado una persona que da la vida por su país y su gente.
“Sentimos mucho orgullo por ellos, no nos hacen falta físicamente porque sabemos que moralmente están con nosotros, están haciendo lo que a ellos les gusta, realizando de corazón su labor, aún con el dolor que sienten porque sabemos que las pocas veces que podían llamarnos estaban con mucha preocupación de sus hijos, de nosotras, qué estábamos pasando porque no dejaba de temblar”.
Esta Unidad Habitacional Militar de Ixtepec III fue una de los primeros complejos intervenido por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) para su reconstrucción, consta de 3 edificios que albergan 60 casas, además de que fue edificada con materiales antisísmicos, mejorada con áreas verdes, juegos infantiles y canchas deportivas.
“Que la Secretaría de la Defensa Nacional se haya preocupado por nosotros y nuestras familias, los soldados contentos, no nos queda otra más que corresponder con nuestro trabajo; si en este caso es ayudar a la población que lo necesita, que más satisfacción para nosotros”, declaro el del Teniente Coronel Zenón Cisneros Martínez, ante la reconstrucción de los hogares del personal militar.
“Fue una experiencia dura, pero deja cosas buenas como la unión, hermandad, porque nos unimos las señoras al hacer la comida para todos, pero creo que esta misma unión y hermandad se dio en la región y en todo México, porque muchas personas ayudaron con despensas o donativos y eso solo el pueblo mexicano”, finalizó la señora Blanca Estela Sánchez Ruelas.