Javier Sicilia se mostró satisfecho por la captura de Jesús El Negro Radilla, presunto jefe del cártel del Pacífico del Sur en Morelos, y solicitó a la procuradora general de la República, Marisela Morales, que le permita entrevistarse con el detenido, quien es señalado como el asesino de su hijo Juan Francisco Sicilia y de seis personas más.
Así lo informó el representante legal del escritor, Julio Hernández, quien aseguró que dicha petición ya es analizada por la titular de la PGR.
El abogado reconoció el trabajo de esa dependencia, así como el papel de la Policía Federal, “y desde luego de Genaro García Luna como director de ese instituto”.
Sin embargo, Hernández aclaró que “no estamos agradecidos como servilmente puede parecer, es decir, es una sorpresa que hayan detenido a los delincuentes, cuando en realidad debe ser el pan de todos los días”, ya que ese trabajo está dentro de sus obligaciones.
En entrevista con MILENIO, el abogado manifestó que Sicilia dijo estar satisfecho por la detención del presunto narcotraficante, producto de una investigación “pulcra” que realizó la Policía Federal y que permitió también la ubicación de José Luis Luquín Delgado, El Jabón, identificado como otro autor material del crimen.
De igual manera, indicó que iniciaron los trámites para que se realice la entrevista con el probable jefe del CPS en Morelos.
“Esa es la información que me da a mí Javier, me pide que haga los trámites necesarios con la procuraduría; bueno, ya entablamos conversaciones para hacerlo de la mejor manera posible sin que esto altere el curso de las indagatorias”, apuntó.
—¿Le han dado algún plazo?
—No, y ni lo hemos fijado. Yo le pedí a la autoridad que cuando ella estimara que esto se puede hacer, si había condiciones de seguridad y que era factible que no se alteraran los hechos, en ese momento lo haríamos con mucho gusto.
—¿La petición se la hizo directamente a la procuradora general de la República?
—Directamente a la procuradora y quedó de estudiar el caso; no lo vio con malos ojos, pero hasta este momento no tenemos nada definido.
—¿Cuál es el motivo de que Sicilia busque esta entrevista?
—Eso no lo platiqué con Javier, pero yo lo intuyo, y esa es una cuestión estrictamente personal, por su filosofía, místico-católica de Javier, pues hace que temas como el perdón, como la expiación, como la reivindicación, todo esto tenga que ver con esta entrevista.
Jesús El Negro Radilla fue puesto a disposición del agente del Ministerio Público federal adscrito al Centro de Mando de la Policía Federal, en Iztapalapa.
Durante la entrevista, Julio Hernández expresó que tras reunirse con la procuradora, comentó que con los elementos reunidos en esta investigación, son ya suficientes las pruebas para que la PGR consigne el expediente de la indagatoria y se obtenga una sentencia máxima de 70 años de prisión.
“No puede uno dejar de reconocer que se han hecho estas detenciones”, sostuvo Hernández, en entrevista radiofónica con Ciro Gómez Leyva.
Posteriormente, destacó ese trabajo y el de la PGR en MILENIO Televisión, con Yuli García, al señalar que se obró con la atingencia necesaria, se agotaron los procedimientos que debieron hacerse, no se escatimaron recursos y todo esto “deja los cimientos para una sentencia condenatoria, que es lo que buscamos”.
Reiteró su reconocimiento al trabajo, tanto de la PGR como de la Policía Federal en el caso concreto, pero aclaró que “no estamos agradecidos como servilmente puede parecer, porque esto debe ser el pan de todos los días, “no la sorpresa de que en un caso aislado detenga a los delincuentes, de manera que reconocemos el trabajo de la autoridad, pero creemos que este trabajo está en el marco de sus obligaciones”.
“Luz de esperanza”
El abogado de Javier Sicilia sostuvo que si en este caso la autoridad pudo dar con los responsables, con la integración de una averiguación previa con pruebas científicas, contundentes e irrefutables, también quiere decir que en otros casos lo puede hacer, “y esa es la luz de esperanza” que surge con esto.
El pasado 27 de marzo, Juan Francisco Sicilia Ortega apareció en el interior de una camioneta junto a otras seis personas muertas, entre ellos una mujer de 44 años, en Temixco, Morelos. Todos estaban atados de pies y manos.
Milenio
