Evitar los cambios bruscos de temperatura en esta época de lluvias, mantener abrigados a niños y adultos mayores, consumir abundantes líquidos, frutas y verduras amarillas o anaranjadas, ricas en vitaminas A y C, ayudan a prevenir las Infecciones Respiratorias Agudas Severas (IRAS).
Así lo dio a conocer en entrevista el jefe de la unidad de Epidemiologia de los Servicios de Salud de Oaxaca(SSO), Miguel Ángel Solano Ceh, quien detalló que hasta la semana epidemiológica número 28 se han registrado 471 mil 660 casos de IRAS, ubicando al estado a nivel nacional en la posición número nueve.
Informó que la región de Valles Centrales ha contabilizado 199 mil 263 casos, seguido de la Mixteca con 68 mil 358, el Istmo con 66 mil 769, la Costa con 53 mil 621, Tuxtepec con 50 mil 586 y la Sierra con 33 mil 63casos.
Agregó que es importante ventilar las habitaciones de los menores, dar lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida, que los infantes cuenten con sus esquemas de vacunación de acuerdo a su edad, evitar fumar cerca de ellos y no utilizar braseros en los hogares.
Dijo que durante la administración del gobernador del estado, Gabino Cué Monteagudo, y del titular de los SSO, Germán Tenorio Vasconcelos, se ha reforzado la atención médica en las unidades de primer nivel, garantizando el suficiente abasto de medicamentos, así como de promoción a la salud.
Solano Ceh, dio a conocer que los síntomas que se presentan son; estornudos, escurrimiento u obstrucción nasal, dolor de garganta, oído, cabeza, fiebre, enronquecimiento o tos, y se debe poner atención si los niños manifiestan respiración rápida o dificultad para hacerlo, así como problemas para beber o amamantarse.
Por lo que es importante que acudan a su unidad médica más cercana, añadió que si algún miembro de la familia padece una infección respiratoria es importante aumentar la ingesta de líquidos, que su alimentación sea habitual y no automedicarse.
Finalmente reconoció que las IRAS son enfermedades infecciosas, causadas por microorganismos, que afectan el aparato respiratorio durante un periodo menor de 15 días, siendo que en los menores de cinco años presentan de cuatro a ocho episodios por año.