“El futuro está oculto detrás de los hombres que lo hacen”
Anatole France
El 2014 termina. Nos deja con vivencias y experiencias que solo volverán en la memoria. Este año se va pero nos deja sucesos importantes que disfrutamos o sufrimos y dejaron una marca en nuestras vidas así como en la manera que se mueve nuestro país y el mundo. En el ámbito internacional presenciamos eventos históricos: la restauración de las relaciones diplomáticas entre Cuba y EUA; el conflicto entre en Ucrania que revivió las tensiones entre Rusia y Occidente; las elecciones en EUA que devolvieron la mayoría a los republicanos en el congreso; protestas en Venezuela; Alemania se corono campeona del Mundo en Brasil; la crisis de los fondos “buitre” en Argentina; la abdicación del rey de España, y un largo etc.
En cuanto a México: el “Chapo” Guzmán fue atrapado; las reformas estructurales fueron aprobadas en el Legislativo; se presentaron casos lamentables de violencia y corrupción, siendo la desaparición de los 43 normalistas en Guerrero y el caso de la matanza de Tlatlaya quizá los más significativos; el gobernador de Guerrero pidió licencia y este estado se unió a Michoacán como las entidades gobernadas por interinos que no fueron electos por los ciudadanos; los escándalos de Grupo Higa, primero con la “Casa Blanca” del presidente y la Primera Dama, y luego con el Secretario de Hacienda Luis Videgaray; se realizaron históricas movilizaciones sociales; nacieron nuevos partidos políticos; y un sin fin de situaciones vergonzosas por parte de nuestros políticos que pudimos apreciar en medios de comunicación y redes sociales caracterizaron este año.
Aun cuando Enrique Peña Nieto recibió el premio del “Estadista Mundial”, el 2014 cierra con un Titular del Ejecutivo muy debilitado, no solo por los acontecimientos ya mencionados, sino por la incapacidad de enfrentarlos y dotar soluciones. Así como EPN, el 2014 tuvo a sus villanos favoritos: Juan José Abarca, Ángel Aguirre, Juan Armando Hinojosa del Grupo Higa, sin olvidar al Secretario de Hacienda, Luis Videgaray aun cuando fue nombrado “Ministro de Finanzas del Año” por la revista EuroMoney, y Foreign Policy lo consideró entre los “100 pensadores globales”, identificado como el cerebro detrás del presidente y el causante de la aprobación de la reformas estructurales. Reputación que no parecen compartir la mayoría de los mexicanos. No por nada crece el rumor que habrá cambio de funcionarios de primera línea en el Gabinete antes de la primera quincena de Enero, para intentar salir del bache que resultó ser el 2014 para la administración priista.
En cuanto al 2015 tanto el ámbito económico como el político no parecen muy alentadores. Económicamente hablando se presentaran sucesos que afectaran directamente a México y que escapan del control del gobierno. Los bajos precios de petróleo serán una constante en 2015, debido a la disminución internacional de demanda de hidrocarburos y a la sobreproducción mundial del crudo. Además el crecimiento moderado de la economía mundial (y de EUA), tendencia en 2014, posiblemente continúe este año que llega. Hemos visto como en fechas recientes el peso se ha ido despreciando frente al dólar, lo que ha generado incertidumbre, lo que sirve como parámetro para lo que nos espera.
Tampoco debemos olvidar que la secretaria de hacienda no ha atinado al pronóstico de crecimiento anual en estos dos años de administración. Para 2013 programaron un crecimiento de 3.5 por ciento que cerro ese año en un 1.4. En 2014 se pretendía crecer en un 3.9 por ciento, para llegar tan solo a un 2.1%. Esto nos hace pensar que en 2015 tampoco se llegará a lo pronosticado.
En lo político, las fuerzas políticas en este 2015 se enfocaran totalmente en las campañas y su prioridad será la agenda electoral ante todo, con las miras en ganar espacios en el proceso electoral. Además de las elecciones para el Congreso habrá nueve elecciones para gobernador, las más relevantes las de Nuevo León, por su importancia económica y Michoacán, por la delicada situación de inseguridad que vive el estado.
La aparición de nuevos partidos, en especial MORENA, viene a modificar el panorama electoral y afectará a los partidos identificados como de izquierda, tanto que algunos analistas vaticinan la desaparición de algún partidos político. Esta idea no es tan descabellada, considerando que por primera vez tendremos candidaturas independientes, además de que no existirán coaliciones como las que nos tenían acostumbrado, modificándose a candidaturas comunes lo que hace peligrar a más de uno de los considerados partidos “satélite”. Todo esto con la aparición de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales que modifica la forma de realizar las campañas, así como la manera de fiscalizar los recursos por parte de los partidos.
Las encuestas y estudios de opinión demuestran que los partidos más golpeados en las preferencias de la ciudadanía rumbo al 2015 son el PRI y el PRD, que son identificados como los culpables de los sucesos recientes de violencia y corrupción. Por otro lado, si tomamos como referencia las últimas elecciones intermedias vemos que el electorado castiga al partido en el poder, siendo la tendencia en 1997, 2003 y 2009. Aun así, parece que el PRI no perderá su carácter de primera fuerza política en el país pero bajará sus números respecto a la elección 2012.
Tras un 2014 para el olvido, esperemos que el 2015 nos traiga algo mejor lo que parece muy difícil. Lo que sí parece seguro es que las protestas sociales continuarán, el panorama económico no se presenta alentador y las fuerzas políticas estarán más preocupadas por buscar vencer en la elección que en solucionar los problemas del país. Así 2015 sugiere más problemas que soluciones.
Twitter: @pachecoperal